26 de marzo de 2012
alcalorpolitico.com
A escasos tres días de que concluya la llamada veda o cuaresma electoral, varias sorpresas habrán de darse en el medio político una vez que arranquen formalmente las campañas de quienes aspiran a la Silla Presidencial.
Redimidos de todo pecado político y no, y con la bendición papal, los tres candidatos más fuertes: Josefina, Enrique y Andrés Manuel librarán una verdadera batalla campal, pues ya tuvieron tiempo suficiente para preparar sus estrategias de campaña que de inmediato pondrán en marcha.
Si como lo señalan analistas políticos, Enrique Peña Nieto continúa como puntero en la preferencia electoral en la mayor parte del país, la situación que se vive en territorio veracruzano es de incertidumbre; es difícil en estos momentos predecir cómo se va a comportar el electorado el primero de julio en cada una de las casillas, pues hay varias facturas pendientes que la ciudadanía habrá de cobrarlas ese día.
Los familiares de las víctimas del crimen organizado, ejecutados, secuestrados o desaparecidos, sin que hasta este momento se pueda detener, tal y como lo reconoce de manera honesta el Jefe del Estado Mayor de la 26ª Zona Militar, General Brigadier Víctor Manuel González Pérez: “no ha disminuido, pero tampoco se ha incrementado la ola de inseguridad, se ha mantenido”; esto, pese al esfuerzo del Ejército y Armada de México para combatir al crimen organizado.
Los cientos o miles de familiares y amigos de los enfermos que fallecieron por causa de la adquisición y aplicación de medicamentos falsos para combatir el cáncer en el Centro Estatal de Cancerología, CECAN; un despiadado acto de corrupción criminal denunciado en su momento por personal del mismo hospital, sin que al día de hoy haya un solo responsable.
Los miles de defraudados de un cuento llamado “Casas Sofom”, cuyo tema continúa como pendiente en los cajones del olvido, pese al señalamiento directo a los responsables.
Las más de 20 mil familias defraudadas por las cajas de ahorro Cofía y Cofisur, en que con engaños muchas de estas perdieron su único patrimonio, producto del trabajo de toda su vida.
Todo esto ocasiona demasiada incertidumbre que pone en que pensar al electorado, al que se le subestima, pero que el primero de julio llevará bajo el brazo las facturas correspondientes al momento de acudir a las urnas.
Todos estos miles de ciudadanos tal vez no supieron quien se las hizo, hasta después de ese día sabremos quién se las tenía que pagar.
[email protected]
Redimidos de todo pecado político y no, y con la bendición papal, los tres candidatos más fuertes: Josefina, Enrique y Andrés Manuel librarán una verdadera batalla campal, pues ya tuvieron tiempo suficiente para preparar sus estrategias de campaña que de inmediato pondrán en marcha.
Si como lo señalan analistas políticos, Enrique Peña Nieto continúa como puntero en la preferencia electoral en la mayor parte del país, la situación que se vive en territorio veracruzano es de incertidumbre; es difícil en estos momentos predecir cómo se va a comportar el electorado el primero de julio en cada una de las casillas, pues hay varias facturas pendientes que la ciudadanía habrá de cobrarlas ese día.
Los familiares de las víctimas del crimen organizado, ejecutados, secuestrados o desaparecidos, sin que hasta este momento se pueda detener, tal y como lo reconoce de manera honesta el Jefe del Estado Mayor de la 26ª Zona Militar, General Brigadier Víctor Manuel González Pérez: “no ha disminuido, pero tampoco se ha incrementado la ola de inseguridad, se ha mantenido”; esto, pese al esfuerzo del Ejército y Armada de México para combatir al crimen organizado.
Los cientos o miles de familiares y amigos de los enfermos que fallecieron por causa de la adquisición y aplicación de medicamentos falsos para combatir el cáncer en el Centro Estatal de Cancerología, CECAN; un despiadado acto de corrupción criminal denunciado en su momento por personal del mismo hospital, sin que al día de hoy haya un solo responsable.
Los miles de defraudados de un cuento llamado “Casas Sofom”, cuyo tema continúa como pendiente en los cajones del olvido, pese al señalamiento directo a los responsables.
Las más de 20 mil familias defraudadas por las cajas de ahorro Cofía y Cofisur, en que con engaños muchas de estas perdieron su único patrimonio, producto del trabajo de toda su vida.
Todo esto ocasiona demasiada incertidumbre que pone en que pensar al electorado, al que se le subestima, pero que el primero de julio llevará bajo el brazo las facturas correspondientes al momento de acudir a las urnas.
Todos estos miles de ciudadanos tal vez no supieron quien se las hizo, hasta después de ese día sabremos quién se las tenía que pagar.
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