Este lunes 23, el presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PAN, Gustavo Madero, tenía programado asistir a una estación de radio en la ciudad de México, pero de última hora el dirigente del blanquiazul llamó por teléfono al periodista Sergio Sarmiento para disculparse pues dijo que no podía asistir a la entrevista porque lo habían mandado a llamar de la oficina del presidente Felipe Calderón.

¿Qué podía tratar el mandatario mexicano con el dirigente formal de su partido? Obviamente que nada qué ver con las fumarolas del Popocatépetl ni con el cuestionado combate de su gobierno al crimen organizado.

El único asunto sobre el que debieron conversar es el del desplome en las encuestas de la candidata presidencial del PAN, Josefina Vázquez Mota, quien en las más recientes mediciones figura empatada o rebasada por el abanderado de la izquierda, Andrés Manuel López Obrador, cuando todavía hace dos meses, a finales de febrero pasado, en una reunión privada con 700 consejeros de Banamex, Calderón presumió –según un sondeo que mostró de la Presidencia de la República– que su correligionaria se ubicaba a sólo cuatro puntos de distancia del puntero Enrique Peña Nieto, del PRI.


Calderón, quien obtuvo un triunfo muy apretado en la polémica elección presidencial de 2006 –comicios en los que su antecesor, el también panista Vicente Fox, intervino y puso en riesgo el proceso electoral, según consignó en su sentencia el propio Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación– parece estar desesperado por el estancamiento de Vázquez Mota en las encuestas pese a que hace un par de semanas la candidata del PAN fue obligada a realizar ajustes en su equipo de campaña, al cual se incorporaron familiares, compadres y ex colaboradores cercanos del Presidente.

El jueves pasado, el Consejo General del Instituto Federal Electoral (IFE) determinó que Calderón violó la Constitución General de la República, al hacerse promoción personal mediante el envío de cartas a los contribuyentes, en las que ensalza obras y logros de su gobierno. Para el organismo electoral, el mandatario mexicano de filiación panista hizo propaganda personalizada con recursos públicos, ya que las misivas fueron enviadas desde las oficinas del Servicio de Administración Tributaria (SAT), a través de correo electrónico y también mediante los mecanismos del Servicio Postal Mexicano (Sepomex).

Sin embargo, en el resolutivo aprobado por el Consejo General del IFE se hace referencia a que el presidente de la República, si bien infringió la ley, queda a salvo de cualquier sanción ya que la propia Constitución señala que “el presidente de la República, durante el tiempo de su encargo, sólo podrá ser acusado por traición a la patria y delitos graves del orden común.”


Calderón violó el artículo 134 de la Constitución, en cuyo penúltimo párrafo establece claramente: “La propaganda, bajo cualquier modalidad de comunicación social, que difundan como tales, los poderes públicos, los órganos autónomos, las dependencias y entidades de la administración pública y cualquier otro ente de los tres órdenes de gobierno, deberá tener carácter institucional y fines informativos, educativos o de orientación social.

“En ningún caso esta propaganda incluirá nombres, imágenes, voces o símbolos que impliquen promoción personalizada de cualquier servidor público.”

Sin embargo, la carta de referencia, fechada el 14 de marzo del año en curso, cuenta con el sello oficial y una leyenda en el extremo superior derecho que dice “Del escritorio del C. Felipe Calderón Hinojosa, presidente de los Estados Unidos mexicanos”.


En ella, Calderón se refería así a cada destinatario: “Te felicito por ser uno de los millones de contribuyentes que con su trabajo y esfuerzo, demuestran todos los días su responsabilidad y compromiso con México.

“Gracias al cumplimiento de tus obligaciones, estamos transformando a México en una nación más desarrollada. Con tu contribución, construimos más obras como carreteras, hospitales y escuelas que mejoran tu calidad de vida y la de muchos mexicanos. También, con tu contribución fortalecemos los programas sociales como Oportunidades, Estancias Infantiles y Becas Escolares para ayudar a las familias que menos tienen para salir adelante.

“Cumplir nos beneficia a todos. Por eso, te invito a que sigas trabajando con tesón y energía y cumpliendo con tus obligaciones ciudadanas para impulsar entre todos el progreso de nuestro querido México. Te refrendo mi firme compromiso de continuar trabajando sin descanso para que tú y tu familia puedan vivir mejor. En el Gobierno Federal seguiremos sembrando la semilla del México seguro, justo y próspero que todos queremos”.


Se despedía con “un cordial saludo” y firmaba con su nombre y cargo de “Presidente de los Estados Unidos Mexicanos”.

Pero ni con estas argucias Calderón ha podido hacer crecer en las preferencias electorales a su candidata, en cuyo discurso de campaña presume ser una mujer con muchos pantalones para enfrentar al crimen organizado.

Sin embargo, a la hora de definir en el PAN a los candidatos de mayoría relativa al Senado de la República, Josefina no mostró carácter para defender las posiciones de sus aliados en varias entidades, entre ellas Veracruz, donde el ex dirigente estatal del blanquiazul, Alejandro Vázquez Cuevas, fue excluido mientras que al ex alcalde porteño Julen Rementería lo relegaron en la segunda candidatura de la fórmula panista, por lo que sus posibilidades de llegar a la Cámara alta del Congreso de la Unión son en realidad muy remotas.


Josefina decidió no confrontarse con el Comité Ejecutivo Nacional de su partido que en tres ocasiones consecutivas sostuvo a Fernando Yunes Márquez en la primera candidatura, la cual le fue revocada inicialmente al hijo del ex priista Miguel Ángel Yunes Linares por la Comisión Nacional de Elecciones del PAN y luego, en dos ocasiones, por la Sala Regional en Xalapa del Tribunal Federal Electoral.

Este conflicto interno fue lo que motivó que Vázquez Mota suspendiera su visita a Veracruz el Sábado de Gloria y que hasta la fecha no haya puesto un pie en este estado que cuenta con el tercer padrón electoral del país.

La semana antepasada, Álvaro Delgado, reportero de la revista “Proceso”, mantuvo esta conversación con un alto personaje del PAN nacional:


–“¿Qué le deben a Yunes?

–“Ese es el quid del asunto. Es sabido que él ha amenazado que si no ponen a su hijo, si no lo sostenían, él se iba del partido. Se lo dijo a la candidata, se lo dijo a Roberto Gil Zuarth directamente, además de muchos otros. Yo creo que hay algo más, un acuerdo más allá de eso.

–“Si es él candidato, ¿habrá unidad del panismo?


–“No”.

Eso parece explicar por qué Josefina, la “diferente”, no levanta en las encuestas a pesar de que el presidente Calderón, por apoyarla, hasta violenta la propia Constitución.