21 de mayo de 2012
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Twitter:HELIHERRERA.es
Era presidente de México Adolfo López Mateos cuando estalló la huelga ferrocarrilera en 1959 encabezada por Demetrio Vallejo y Valentín Campa Salazar, el primero oaxaqueño y el segundo regiomontano, a quienes por exigir democracia sindical y aumento salarial para sus agremiados fueron recluidos por once años en el palacio de Lecumberri.
Algo similar le ocurrió a Otón Salazar, aquel guerrerense que fundó el Movimiento Revolucionario del Magisterio (MRM) y que a través de movilizaciones sociales intentó democratizar al SNTE. Su destino fue el mismo que Vallejo y Campa, porque en aquellas fechas los gobiernos priístas defendían el charrismo, y la cárcel de Lecumberri se llenaba de todos aquellos dirigentes sociales y sindicales disidentes que marchaban por las avenidas exigiendo autonomía en sus sindicatos y mejores prestaciones salariales.
Los tres tenían algo en común: eran dirigentes sindicales que vivían con precariedad, en la justa medianía que les permitía su salario, pero todos ellos tenían un extraordinario poder de convocatoria que lograron desde 1956 y hasta su encarcelamiento, movilizar a decenas de miles de trabajadores en las calles, y que el gobierno de López Mateos solo los pudo encarcelar bajo el delito de >disolución social< que consagraban los artículos 145 y 145 bis del Código Penal de aquel tiempo, mismo que fue derogado en 1970, pero nunca por tener dinero mal habido o por vivir como hoy viven la mayoría de los dirigentes sindicales del oficialismo.
¿De quién es la culpa que doña Elba Esther Gordillo sea dueña de departamentos de lujo en la zona de Las Lomas (de mayor plusvalía en el Distrito Federal); o que sea propietaria de una residencia de dos millones de dólares en la ciudad de San Diego California, allá en los Estados Unidos, o de un departamento en el centro de París, Francia? Desde luego que de ella no, sino de los gobiernos del PRI y del PAN que la han hecho su aliada y protegida toda la vida.
¿De quién es la culpa que el periódico capitalino Reforma haya dado a conocer el sábado la vida de jaque con que se desenvuelve el secretario general del sindicato de trabajadores petroleros de la república mexicana, que es propietario de una casa de lujo en una zona exclusiva de Cancún, frente al boulevard Kukulkan, valuada en 3 millones de dólares, con un yate en la riviera maya con un valor de un millón y medio de dólares, y que viaje con su hija en jets privados a todo el mundo con todo y perros, y que en sus comidas deguste botellas de vino de la marca vega Sicilia con un valor cada botella de 10 mil pesos?
De Carlos Romero Deschamps no, ni de su hija Paulina Romero que tiene una colección de bolsas de la casa francesa Hermes, modelo birkin que valen la más barata 200 mil pesos, y la que exhibe en sus viajes por Europa 800 mil pesos, y que de acuerdo con el salario que percibe como petrolero de 24 mil 633 pesos mensuales, con todo y prestaciones sociales, no le alcanzaría ni siquiera para alimentar a los tres bulldogs que acompañan a su hija por sus constantes viajes.
Recuerdo la campaña de Vicente Fox cuando afirmaba (para ganarse simpatías y votos), que de llegar él a la presidencia de la República iba a acabar con la corrupción, y que iba a meter a la cárcel a tiburones, peces y hasta charales, empezando por los nefastos líderes sindicales que tanto daño le hacían a México, y ya como ejecutivo federal no solo no metió a nadie, sino que les permitió que se siguieran enriqueciendo con el dinero de las cuotas sindicales y del erario público.
Elba Esther sigue amasando fortunas gracias al apoyo no solo de los gobiernos priístas en su momento, sino del que le dio el actual Presidente Felipe Calderón que le concedió la subsecretaria de educación para su yerno, y las direcciones de la Lotería Nacional y del ISSSTE para dos de sus incondicionales.
Hoy, el líder petrolero Romero Deschamps es candidato a senador del PRI en la lista plurinominal. Encabeza los primeros lugares lo que le asegura serlo del 2012 al 2018 y con ello fuero constitucional para ser intocable. El yerno y la hija de la maestra Elba Esther también van en los primeros lugares de las listas del PANAL.
Leía al diputado Flavino Ríos Alvarado en su cuenta de Facebook afirmar que Enrique Peña Nieto es el candidato que ha hecho las mejores propuestas y asegura un México mejor y le hice una pregunta allí mismo, relativa a que ¿si van a construir ese México con Carlos Romero Deschamps como Senador, a sabiendas de lo corrupto que es?
¿Acaso no es un insulto, una majadería para los arriba de 500 mil niños desnutridos que hay en México, lo que la hija de Carlos Romero Deschamps se gasta diariamente en botellas de vino? ¿Acaso no es inhumano para los 52 millones de pobres en México la vida desenfrenada que llevan estos líderes sindicales corruptos, que unos van como candidatos del PANAL y otros del PRI para ser diputados y senadores?
Como exigirle a la dueña del PANAL honradez si ella no es honrada, o como exigirle al candidato del PRI que combata y meta a la cárcel a los corruptos de su partido, si nunca procedió contra Arturo Montiel, que fue otro de los políticos de ese instituto que se enriqueció con dinero público y privado, traficando influencias.
Y por último otra reflexión: ¿Por qué votar por el PAN si ni Fox ni Calderón cumplieron la palabra empeñada de que iban a liquidar la corrupción en México, cuando ellos mismos se volvieron cómplices al cubrir con manto protector a todos estos líderes sindicales y políticos ladrones? ¿Por qué votar por doña Josefina ahora que dice que va a poner en orden a doña Elba Esther, dado que cuando fue secretaria de educación ni un pelo le tocó?
Repugnante que cuando millones y millones de compatriotas viven en la pobreza extrema, en medio de la hambruna, haya políticos y líderes sindicales que gastan en una bolsa para sus hijas 800 mil pesos, o se toman una botella de vino en la comida de diez mil, y mas repugnante aún que sus partidos políticos les quieran dar fuero constitucional haciéndolos senadores y diputados.
Por moral y decencia, por humanismo y solidaridad, porque no debemos heredarle a nuestros hijos este México actual, reflexionemos nuestro voto este primero de julio.
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Era presidente de México Adolfo López Mateos cuando estalló la huelga ferrocarrilera en 1959 encabezada por Demetrio Vallejo y Valentín Campa Salazar, el primero oaxaqueño y el segundo regiomontano, a quienes por exigir democracia sindical y aumento salarial para sus agremiados fueron recluidos por once años en el palacio de Lecumberri.
Algo similar le ocurrió a Otón Salazar, aquel guerrerense que fundó el Movimiento Revolucionario del Magisterio (MRM) y que a través de movilizaciones sociales intentó democratizar al SNTE. Su destino fue el mismo que Vallejo y Campa, porque en aquellas fechas los gobiernos priístas defendían el charrismo, y la cárcel de Lecumberri se llenaba de todos aquellos dirigentes sociales y sindicales disidentes que marchaban por las avenidas exigiendo autonomía en sus sindicatos y mejores prestaciones salariales.
Los tres tenían algo en común: eran dirigentes sindicales que vivían con precariedad, en la justa medianía que les permitía su salario, pero todos ellos tenían un extraordinario poder de convocatoria que lograron desde 1956 y hasta su encarcelamiento, movilizar a decenas de miles de trabajadores en las calles, y que el gobierno de López Mateos solo los pudo encarcelar bajo el delito de >disolución social< que consagraban los artículos 145 y 145 bis del Código Penal de aquel tiempo, mismo que fue derogado en 1970, pero nunca por tener dinero mal habido o por vivir como hoy viven la mayoría de los dirigentes sindicales del oficialismo.
¿De quién es la culpa que doña Elba Esther Gordillo sea dueña de departamentos de lujo en la zona de Las Lomas (de mayor plusvalía en el Distrito Federal); o que sea propietaria de una residencia de dos millones de dólares en la ciudad de San Diego California, allá en los Estados Unidos, o de un departamento en el centro de París, Francia? Desde luego que de ella no, sino de los gobiernos del PRI y del PAN que la han hecho su aliada y protegida toda la vida.
¿De quién es la culpa que el periódico capitalino Reforma haya dado a conocer el sábado la vida de jaque con que se desenvuelve el secretario general del sindicato de trabajadores petroleros de la república mexicana, que es propietario de una casa de lujo en una zona exclusiva de Cancún, frente al boulevard Kukulkan, valuada en 3 millones de dólares, con un yate en la riviera maya con un valor de un millón y medio de dólares, y que viaje con su hija en jets privados a todo el mundo con todo y perros, y que en sus comidas deguste botellas de vino de la marca vega Sicilia con un valor cada botella de 10 mil pesos?
De Carlos Romero Deschamps no, ni de su hija Paulina Romero que tiene una colección de bolsas de la casa francesa Hermes, modelo birkin que valen la más barata 200 mil pesos, y la que exhibe en sus viajes por Europa 800 mil pesos, y que de acuerdo con el salario que percibe como petrolero de 24 mil 633 pesos mensuales, con todo y prestaciones sociales, no le alcanzaría ni siquiera para alimentar a los tres bulldogs que acompañan a su hija por sus constantes viajes.
Recuerdo la campaña de Vicente Fox cuando afirmaba (para ganarse simpatías y votos), que de llegar él a la presidencia de la República iba a acabar con la corrupción, y que iba a meter a la cárcel a tiburones, peces y hasta charales, empezando por los nefastos líderes sindicales que tanto daño le hacían a México, y ya como ejecutivo federal no solo no metió a nadie, sino que les permitió que se siguieran enriqueciendo con el dinero de las cuotas sindicales y del erario público.
Elba Esther sigue amasando fortunas gracias al apoyo no solo de los gobiernos priístas en su momento, sino del que le dio el actual Presidente Felipe Calderón que le concedió la subsecretaria de educación para su yerno, y las direcciones de la Lotería Nacional y del ISSSTE para dos de sus incondicionales.
Hoy, el líder petrolero Romero Deschamps es candidato a senador del PRI en la lista plurinominal. Encabeza los primeros lugares lo que le asegura serlo del 2012 al 2018 y con ello fuero constitucional para ser intocable. El yerno y la hija de la maestra Elba Esther también van en los primeros lugares de las listas del PANAL.
Leía al diputado Flavino Ríos Alvarado en su cuenta de Facebook afirmar que Enrique Peña Nieto es el candidato que ha hecho las mejores propuestas y asegura un México mejor y le hice una pregunta allí mismo, relativa a que ¿si van a construir ese México con Carlos Romero Deschamps como Senador, a sabiendas de lo corrupto que es?
¿Acaso no es un insulto, una majadería para los arriba de 500 mil niños desnutridos que hay en México, lo que la hija de Carlos Romero Deschamps se gasta diariamente en botellas de vino? ¿Acaso no es inhumano para los 52 millones de pobres en México la vida desenfrenada que llevan estos líderes sindicales corruptos, que unos van como candidatos del PANAL y otros del PRI para ser diputados y senadores?
Como exigirle a la dueña del PANAL honradez si ella no es honrada, o como exigirle al candidato del PRI que combata y meta a la cárcel a los corruptos de su partido, si nunca procedió contra Arturo Montiel, que fue otro de los políticos de ese instituto que se enriqueció con dinero público y privado, traficando influencias.
Y por último otra reflexión: ¿Por qué votar por el PAN si ni Fox ni Calderón cumplieron la palabra empeñada de que iban a liquidar la corrupción en México, cuando ellos mismos se volvieron cómplices al cubrir con manto protector a todos estos líderes sindicales y políticos ladrones? ¿Por qué votar por doña Josefina ahora que dice que va a poner en orden a doña Elba Esther, dado que cuando fue secretaria de educación ni un pelo le tocó?
Repugnante que cuando millones y millones de compatriotas viven en la pobreza extrema, en medio de la hambruna, haya políticos y líderes sindicales que gastan en una bolsa para sus hijas 800 mil pesos, o se toman una botella de vino en la comida de diez mil, y mas repugnante aún que sus partidos políticos les quieran dar fuero constitucional haciéndolos senadores y diputados.
Por moral y decencia, por humanismo y solidaridad, porque no debemos heredarle a nuestros hijos este México actual, reflexionemos nuestro voto este primero de julio.