18 de junio de 2012
alcalorpolitico.com
Muy discretamente, a mediados de abril de este año, el diputado federal del PAN por el distrito de Tuxpan, Miguel Martín López, tomó posesión como director general de Organizaciones y Partidos Políticos dependiente de la Secretaría de Gobierno.
Así, apenas dos años después de la tormentosa sucesión estatal de 2010, en la que tildó públicamente a Gerardo Buganza Salmerón de “caprichoso” por haber renunciado al PAN tras la imposición de Miguel Ángel Yunes Linares como candidato, Martín López pasó a ser subordinado directo del ex senador panista cordobés.
Y no sólo eso: ahora es empleado también del gobernador Javier Duarte de Ochoa, su ex compañero de curul en la LXI Legislatura federal, al cual descalificó el 9 de diciembre de 2009 desde la tribuna de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión en un candente debate propiciado por la cercana disputa de la gubernatura de Veracruz.
En ese intercambio de acusaciones entre legisladores del PRI y PAN, el tuxpeño y Silvia Monge Villalobos, diputada blanquiazul por Coatepec, exhibieron a Duarte de Ochoa, quien junto con Salvador Manzur Díaz, actual presidente municipal de Boca del Río, habían arremetido en contra de Yunes Linares, sumándose a la petición del diputado Antonio Benítez Lucho para que se exhortara respecto a la inmediata intervención de la Procuraduría General de la República ante las actividades del director general del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, señalado de haber dispuesto de recursos públicos federales en su provecho político personal, pues desde entonces ya desplegaba un fuerte activismo como aspirante del PAN al gobierno de Veracruz. Por esa misma razón, otra legisladora priista veracruzana, Elvia Ruiz Cesáreo, había interpuesto una denuncia en contra del titular del ISSSTE ante la Fiscalía Especializada en Delitos Cometidos por los Servidores Públicos de la PGR.
Miguel Martín, quien por esas fechas estaba convencido de que con Yunes Linares Veracruz tenía la oportunidad histórica de transitar hacia la democracia y el PAN de lograr la alternancia en el gobierno, se le fue a la yugular a Javier Duarte, acusando al legislador cordobés de hacer anticipadamente precampaña por la gubernatura en todo el estado a bordo de aeronaves oficiales. El diputado tuxpeño mostró documentos sobre las bitácoras de vuelo, matrículas y fotografías de los aviones. Y cerró su intervención en la tribuna expresándole al ex secretario de Finanzas y Planeación que lo que sucedía es que Duarte “siente pasos en la azotea” porque –según pronosticó– “el próximo año (2010) van a sentir el hartazgo de los veracruzanos”, haciendo alusión al dispendio y la abultada deuda pública de la administración priista del gobernador Fidel Herrera.
Ahora, dos años y medio después, Miguel Martín López –sobrino del periodista Miguel López Azuara, coordinador general de Comunicación Social del gobierno del estado en la administración del gobernador Patricio Chirinos Calero– está en el ojo del huracán tras el arraigo en Estados Unidos del empresario tuxpeño Francisco Colorado Cessa, el cual enfrenta un juicio en la Corte Judicial del Distrito de Austin, Texas, por presunto lavado de dinero del cártel de Los Zetas.
Miguel Martín ha sido exhibido por sus propios ex compañeros de Acción Nacional, partido al que –según declaró recientemente cuando decidió solicitar licencia como diputado para incorporarse al gobierno de Duarte– nunca pudo afiliarse porque acusó que la dirigencia local del PAN en Tuxpan siempre lo bloqueó. Sin embargo, hasta abril pasado formó parte de la bancada legislativa blanquiazul que coordinó Josefina Vázquez Mota poco antes de que la diputada panista iniciara su precampaña interna por la candidatura presidencial.
Precisamente Martín López acaba de ser evidenciado por el uso de un avión propiedad de Colorado por parte de Vázquez Mota, según quedó registrado en bitácoras de vuelo.
El 14 de mayo de 2010, los pasajeros del avión con matrícula XA-RDJ, propiedad de Aerolíneas Ejecutivas, eran Vázquez Mota –entonces coordinadora de la diputación blanquiazul– quien acudió a apoyar la campaña de Cuauhtémoc Calderón, aspirante a la gubernatura de Zacatecas; de regreso viajó el diputado federal tuxpeño y Alejandro Meléndez, secretario de la panista. El vuelo cubrió la ruta Toluca-Zacatecas y de regreso.
Quince días después, el 29 de mayo, Pancho Colorado viajó en ese avión del Aeropuerto Nacional El Lencero, en Xalapa, a Poza Rica. De ese destino fue llevado sin pasajeros a Toluca y ahí recogió el 30 de mayo a Vázquez Mota, Martín López y al diputado federal Carlos Pérez Cuevas, quienes volaron a Xalapa.
El jueves pasado, al estallar el escándalo mediático por los viajes de Vázquez Mota realizados en aviones del empresario vinculado con Los Zetas, Juan Ignacio Zavala, vocero de la candidata del PAN a la Presidencia, salió a desmentir cualquier liga de Josefina con Colorado y precisó que sus traslados aéreos en 2010 para promover a los candidatos panistas en Aguascalientes y otro destino que no pudo detallar, fueron gestionados por Miguel Martín.
Zavala, cuñado del presidente Felipe Calderón, salió de inmediato a deslindar a Vázquez Mota luego de que Pedro Joaquín Coldwell, dirigente nacional del PRI, pidió investigar el préstamo de aviones a la candidata presidencial del PAN por parte del empresario que es investigado en Estados Unidos por lavado de dinero del narcotráfico.
“Se trata de dos viajes en 2010 gestionados no por la oficina de la entonces diputada Vázquez Mota, sino por un diputado de Veracruz, Miguel Martín, que incluso renunció a la diputación del PAN hace unos meses para incorporarse al gobierno de Javier Duarte”, declaró Zavala, quien el sexenio anterior fue funcionario de la PGR.
¿Martín López realmente ignoraba las correrías de Colorado? Nadie cree que haya sido tan ingenuo, pues no sólo fue funcionario en la administración pública municipal de Tuxpan entre 2006 y 2007 sino que además se desempeñó como coordinador del Sistema de Administración Tributaria (SAT) entre 1998 y 2004.
Y tan lo sabía que poco antes de que se quedara sin fuero legislativo por la licencia solicitada para separarse de su cargo de diputado, corrió una versión periodística de que habría tramitado un amparo ante la justicia federal contra cualquier acto de la PGR, corporación policiaca o instituto armado de la Federación.
¿La razón? El cateo practicado a finales de marzo de este año en un rancho de Colorado ubicado en Tuxpan, donde fueron detenidos por el Ejército y la policía federal un jefe de plaza de Los Zetas, varios sicarios y media docena de trabajadores al servicio del empresario.
Así, apenas dos años después de la tormentosa sucesión estatal de 2010, en la que tildó públicamente a Gerardo Buganza Salmerón de “caprichoso” por haber renunciado al PAN tras la imposición de Miguel Ángel Yunes Linares como candidato, Martín López pasó a ser subordinado directo del ex senador panista cordobés.
Y no sólo eso: ahora es empleado también del gobernador Javier Duarte de Ochoa, su ex compañero de curul en la LXI Legislatura federal, al cual descalificó el 9 de diciembre de 2009 desde la tribuna de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión en un candente debate propiciado por la cercana disputa de la gubernatura de Veracruz.
En ese intercambio de acusaciones entre legisladores del PRI y PAN, el tuxpeño y Silvia Monge Villalobos, diputada blanquiazul por Coatepec, exhibieron a Duarte de Ochoa, quien junto con Salvador Manzur Díaz, actual presidente municipal de Boca del Río, habían arremetido en contra de Yunes Linares, sumándose a la petición del diputado Antonio Benítez Lucho para que se exhortara respecto a la inmediata intervención de la Procuraduría General de la República ante las actividades del director general del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, señalado de haber dispuesto de recursos públicos federales en su provecho político personal, pues desde entonces ya desplegaba un fuerte activismo como aspirante del PAN al gobierno de Veracruz. Por esa misma razón, otra legisladora priista veracruzana, Elvia Ruiz Cesáreo, había interpuesto una denuncia en contra del titular del ISSSTE ante la Fiscalía Especializada en Delitos Cometidos por los Servidores Públicos de la PGR.
Miguel Martín, quien por esas fechas estaba convencido de que con Yunes Linares Veracruz tenía la oportunidad histórica de transitar hacia la democracia y el PAN de lograr la alternancia en el gobierno, se le fue a la yugular a Javier Duarte, acusando al legislador cordobés de hacer anticipadamente precampaña por la gubernatura en todo el estado a bordo de aeronaves oficiales. El diputado tuxpeño mostró documentos sobre las bitácoras de vuelo, matrículas y fotografías de los aviones. Y cerró su intervención en la tribuna expresándole al ex secretario de Finanzas y Planeación que lo que sucedía es que Duarte “siente pasos en la azotea” porque –según pronosticó– “el próximo año (2010) van a sentir el hartazgo de los veracruzanos”, haciendo alusión al dispendio y la abultada deuda pública de la administración priista del gobernador Fidel Herrera.
Ahora, dos años y medio después, Miguel Martín López –sobrino del periodista Miguel López Azuara, coordinador general de Comunicación Social del gobierno del estado en la administración del gobernador Patricio Chirinos Calero– está en el ojo del huracán tras el arraigo en Estados Unidos del empresario tuxpeño Francisco Colorado Cessa, el cual enfrenta un juicio en la Corte Judicial del Distrito de Austin, Texas, por presunto lavado de dinero del cártel de Los Zetas.
Miguel Martín ha sido exhibido por sus propios ex compañeros de Acción Nacional, partido al que –según declaró recientemente cuando decidió solicitar licencia como diputado para incorporarse al gobierno de Duarte– nunca pudo afiliarse porque acusó que la dirigencia local del PAN en Tuxpan siempre lo bloqueó. Sin embargo, hasta abril pasado formó parte de la bancada legislativa blanquiazul que coordinó Josefina Vázquez Mota poco antes de que la diputada panista iniciara su precampaña interna por la candidatura presidencial.
Precisamente Martín López acaba de ser evidenciado por el uso de un avión propiedad de Colorado por parte de Vázquez Mota, según quedó registrado en bitácoras de vuelo.
El 14 de mayo de 2010, los pasajeros del avión con matrícula XA-RDJ, propiedad de Aerolíneas Ejecutivas, eran Vázquez Mota –entonces coordinadora de la diputación blanquiazul– quien acudió a apoyar la campaña de Cuauhtémoc Calderón, aspirante a la gubernatura de Zacatecas; de regreso viajó el diputado federal tuxpeño y Alejandro Meléndez, secretario de la panista. El vuelo cubrió la ruta Toluca-Zacatecas y de regreso.
Quince días después, el 29 de mayo, Pancho Colorado viajó en ese avión del Aeropuerto Nacional El Lencero, en Xalapa, a Poza Rica. De ese destino fue llevado sin pasajeros a Toluca y ahí recogió el 30 de mayo a Vázquez Mota, Martín López y al diputado federal Carlos Pérez Cuevas, quienes volaron a Xalapa.
El jueves pasado, al estallar el escándalo mediático por los viajes de Vázquez Mota realizados en aviones del empresario vinculado con Los Zetas, Juan Ignacio Zavala, vocero de la candidata del PAN a la Presidencia, salió a desmentir cualquier liga de Josefina con Colorado y precisó que sus traslados aéreos en 2010 para promover a los candidatos panistas en Aguascalientes y otro destino que no pudo detallar, fueron gestionados por Miguel Martín.
Zavala, cuñado del presidente Felipe Calderón, salió de inmediato a deslindar a Vázquez Mota luego de que Pedro Joaquín Coldwell, dirigente nacional del PRI, pidió investigar el préstamo de aviones a la candidata presidencial del PAN por parte del empresario que es investigado en Estados Unidos por lavado de dinero del narcotráfico.
“Se trata de dos viajes en 2010 gestionados no por la oficina de la entonces diputada Vázquez Mota, sino por un diputado de Veracruz, Miguel Martín, que incluso renunció a la diputación del PAN hace unos meses para incorporarse al gobierno de Javier Duarte”, declaró Zavala, quien el sexenio anterior fue funcionario de la PGR.
¿Martín López realmente ignoraba las correrías de Colorado? Nadie cree que haya sido tan ingenuo, pues no sólo fue funcionario en la administración pública municipal de Tuxpan entre 2006 y 2007 sino que además se desempeñó como coordinador del Sistema de Administración Tributaria (SAT) entre 1998 y 2004.
Y tan lo sabía que poco antes de que se quedara sin fuero legislativo por la licencia solicitada para separarse de su cargo de diputado, corrió una versión periodística de que habría tramitado un amparo ante la justicia federal contra cualquier acto de la PGR, corporación policiaca o instituto armado de la Federación.
¿La razón? El cateo practicado a finales de marzo de este año en un rancho de Colorado ubicado en Tuxpan, donde fueron detenidos por el Ejército y la policía federal un jefe de plaza de Los Zetas, varios sicarios y media docena de trabajadores al servicio del empresario.