icono menu responsive
Columnas y artículos de opinión
Nuevo Siglo
En la democracia, no hay mayoriteo
Jenaro del Ángel Amador
30 de agosto de 2012
alcalorpolitico.com
Aún se investiga que fue primero; si la democracia del que gana hasta por un voto, o, si ganando por mayoría, ésta deba calificarse como “mayoriteo”.

Este término peyorativo se atribuye a las bancadas legislativas de los partidos de oposición al PRI, antes del año 2000, que así expresaban su inconformidad por tener menos votos que aquél partido, y obviamente, no ganar votaciones en los recintos parlamentarios.

“Ya nos mayoritearon” solían expresar, como si fuera un delito que un partido tuviera los votos suficientes para aprobar iniciativas de ley.


Sin embargo, el lenguaje comenzó a cambiar cuando “las oposiciones” unieron sus votos y hacían y hacen lo que quieren, en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, donde tienen mayoría absoluta, Allí el PRD y socios aprueban lo que les viene en gana y no aceptan que les endilguen el peyorativo “mayoriteo”

El que gana tiene el legítimo derecho a hacer valer sus votos, ¿sino entonces para que se busca tener mayoría?

El “consenso” y los “acuerdos” han venido a corromper el sentido democrático de que se gana hasta con un voto, y si ganas, tienes derecho a decidir que sí y que no. De otro modo, entonces, ¿porqué los partidos de la tríada <<PRD, MC Y PT>> buscan que se les declare “como la segunda fuerza electoral” en San Lázaro?, figura que, por demás, no está contemplada en la ley.


En los recintos legislativos se mide a los partidos en lo individual, por bancadas, y ya en la votación, pueden sumar sus votos hacia una determinación, pero está en la reglamentación que puedan sumarse para constituir “una fuerza política” para escalar una posición que no les corresponde.

En San Lázaro el PRI tiene la mayor cantidad de diputados; le sigue el PAN y después el PRD, el PVEM, el PT, MC, PANAL, porque entonces ¿cómo se llamaría a una presunta suma de diputados del PRI, PVEM y PANAL? ¿Primera gran mayoría? Recuérdese que entre los tres partidos, suman 251 diputados, suficientes para aprobar lo que quieran.

Por esa razón es que el voto mayoritario se ha corrompido al grado de que, por una razón de afinidad social, “deban consensuarse” todas las votaciones aprobatorias de una iniciativa.


Un asunto es que las minorías converjan en interés con la mayoría, y otra, muy distinta, que una decisión de la mayoría deba estar supeditada a que la minoría deba estar de acuerdo.

Por esa razón se entiende lo que algunos timoratos dirigentes del PRI, hayan manifestado “que no mayoritearán” en las votaciones camerales. ¿Entonces para que buscan tener la mayor cantidad de diputados en los Congresos, Federal y Estatales? ¿Para ceder ante los apremios de quienes tienen menos votos?

Una iniciativa de ley se expone, se discute, se nutre de mejores aportes y se lleva a votación en Comisiones. Y ya después, convertida en dictamen, se discute en el Pleno y finalmente se vota, y gana si obtiene la mitad más uno de los votos de los diputados presentes, en tratándose de leyes que no afecten el ámbito de la Constitución.


Será interesante que los que gritan “mayoriteo”, monitorearan las sesiones de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. Allí verán como entienden las minorías en la Federación, pero mayoría en el DF, la democracia, en sus reductos regionales.

Como decían los monigotes de Rius: “Allí nomás sus chicharrones truenan”

P.D.- Aún no principian las sesiones formales y ya la tríada comenzó el carnaval en la Cámara de Diputados..y falta la resolución que legitime como Presidente de México a Enrique Peña Nieto.


P.D.- ¿Y si el incidente policíaco-diplomático de Tres Marías, hubiere sido al revés y en Texas? Por lo pronto los USAboys ya están en sus casas…

P.D.- José Cobos, pítcher tapón, originario de Tuxpan; Humberto Sosa Ahumada, porteño con raíces en Paso de Ovejas; dos veracruzanos del campeón Águila de Veracruz.