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Columnas y artículos de opinión
Al Pie de la Letra
Ingratitud panista
Raymundo Jiménez
9 de octubre de 2012
alcalorpolitico.com
Este sábado 6 falleció en la ciudad de Xalapa la señora Guadalupe Espinoza.

A muchos, seguramente, no les dirá nada el nombre de esta anciana mujer, pero ella era la viuda de don Rubén Efraín González López, el primer dirigente del PAN en Veracruz y primer diputado de representación proporcional a la 51 Legislatura del Congreso del estado, cargo de elección popular que pudo obtener gracias a la Reforma Política que a principios de 1977, al inicio de su administración, impulsó el presidente José López Portillo a través de su secretario de Gobernación, el tuxpeño Jesús Reyes Heroles, para abrir espacios legislativos a partidos minoritarios como Acción Nacional, PPS y PARM.

Pero pese a ser miembro de la familia pionera del partido opositor más antiguo en la entidad, el cadáver de doña Lupita Espinoza fue velado hace tres días en su domicilio particular, ubicado en la calle del Dique número 16, sólo por sus tres hijos y unos cuantos vecinos en la más triste soledad, sin que se apareciera ningún representante del Comité Directivo Estatal o Municipal del PAN, partido que precisamente a partir de la Reforma Política lopezportillista fue ganando paulatinamente otros espacios de poder hasta alcanzar la Presidencia de la República en el año 2000.


El mérito de los primeros líderes panistas como don Rubén Efraín González, un modesto curtidor oriundo de la región de Córdoba, es que debían hacer política desde la oposición en contra de los gobiernos del PRI cuya hegemonía era absoluta.

Y es que en ese entonces los dirigentes del PAN no disponían como hasta ahora de los recursos y programas asistenciales del gobierno federal como Oportunidades, Setenta y Más, Procampo y las becas de Pronabes, sino que debían operar con las simbólicas prerrogativas que recibían de los órganos electorales bajo control gubernamental priista y con las cuotas de sus escasos militantes y simpatizantes.

En la década de los setentas dirigir al partido blanquiazul en Veracruz era una verdadera proeza, un acto de heroísmo anónimo; situación que cambió radicalmente a finales de los años ochentas y principios de los noventas, a partir de que el PAN comenzó a ser visto como una opción real de poder al ganar las principales alcaldías veracruzanas y del país así como las primeras gubernaturas en los estados del norte y centro de la República Mexicana.
El arribismo y oportunismo llegó a su clímax hace doce años cuando Acción Nacional, con Vicente Fox, logró por fin la ansiada alternancia en el poder.


Ex priistas que sus carreras políticas e inexplicables riquezas las forjaron en la impunidad de los gobiernos del partido tricolor, desertaron al PAN en cuanto el Revolucionario Institucional les negó las candidaturas y otras prebendas personales o de grupo que exigían.

Son una especie de neopanistas híbridos: que ni son auténticos militantes del PAN ni han dejado las prácticas más viciadas del PRI, a las cuales han tenido que recurrir para ganar candidaturas e ir consolidando sus cotos de poder al interior del partido blanquiazul.

No es casual que ahora, luego de la estrepitosa derrota en las elecciones federales del pasado 1 de julio, las dirigencias nacional y estatal del PAN anunciaran la depuración y actualización de su padrón de miembros activos y adherentes.


En Veracruz, por ejemplo, el secretario de Fortalecimiento Interno e Identidad del CDE del PAN, Federico Salomón Molina, acaba de informar que actualmente cuentan con 24 mil 145 miembros activos y 148 mil 880 adherentes, que en total suman 173 mil 025.

Habrá que ver con cuantos se quedan después de que el 30 de noviembre próximo, el PAN entregue la Presidencia de la República a Enrique Peña Nieto, del PRI.

No sería raro que algunos “neopanistas” retornaran a las filas del Revolucionario Institucional. Ya se verá en las elecciones locales de julio de 2013.


ORFANDAD AZUL

Por cierto, a 52 días de que el presidente Felipe Calderón Hinojosa, de Acción Nacional, entregue la administración federal al priista Enrique Peña Nieto, el secretario de Acción de Gobierno del Comité Directivo Estatal del PAN, René Messeguer Elizondo, dio a conocer este lunes que los 90 alcaldes veracruzanos de extracción panista han solicitado una reunión de trabajo con el gobernador Javier Duarte de Ochoa, al cual le harán diversas peticiones.

Sin embargo, el ex diputado local dijo que hasta el momento no hay una fecha programada para este encuentro en el que los ediles del partido blanquiazul abordarán con el titular del Poder Ejecutivo del estado diversos temas, entre ellos las dificultades financieras para cubrir los laudos judiciales emitidos a favor de ex empleados municipales que demandaron laboralmente a sus ayuntamientos y que, en algunos casos, el monto total de sus liquidaciones equivalen al cien por ciento del presupuesto anual que ejercen los Cabildos.


Messeguer también expuso que otros de los asuntos que le plantearán al mandatario estatal es el referente a las participaciones federales, además de los programas de obras para sus localidades.

Ni hablar, ahora deberán tocar nuevamente las puertas del gobierno del estado, cuando en el sexenio calderonista que está por concluir algunos arrogantes ediles del PAN gestionaban directamente en la ciudad de México recursos y obras millonarias para sus municipios.