15 de octubre de 2012
alcalorpolitico.com
Lo que se supone debería tener un minucioso seguimiento al desarrollo de las actividades, a la eficiencia y los resultados que debería generar, el Modelo Educativo Integral (in)Flexible, MEIF, en la Universidad Veracruzana, UV, es todo lo contrario, se encuentra en el más absoluto abandono.
A 12 años de haberse implementado, al día de hoy, continúa sin llevarse a cabo una simple evaluación, que por muy sencilla que esta fuera, se podría tener un claro panorama de los resultados que este estuviera arrojando, en beneficio o perjuicio del alumnado.
Lamentablemente los más afectados ante esta situación de apatía hacia el Modelo Educativo son los estudiantes de la UV, que expresado por ellos mismos, uno de los graves problemas que tienen que enfrentar son los horarios quebrados, que aunado al constante ausentismo por parte de muchos maestros, les provoca un fuerte desánimo, a tal grado que muchos se ven obligados a abandonar sus estudios, por los gastos en pasajes extras y comidas fuera de sus casas o pensiones, que tienen que realizar los estudiantes.
Ya en una ocasión el secretario académico de la Universidad Veracruzana, Porfirio Carrillo Castilla, reconoció que el Modelo Educativo Integral y Flexible, MEIF, es deficiente y aceptó que hay ausentismo de parte de los docentes, por lo que los estudiantes reprueban las materias básicas ante la falta de acompañamiento para dichas experiencias educativas. Lo lamentable es que 18 meses después de haber hecho estas declaraciones nada se ha hecho al respecto.
Tal parece que el MEIF de la UV fue creado para otorgar todas las facilidades a los docentes, sin ningún beneficio para los estudiantes, pues los mentores actúan como acompañantes o asesores de los alumnos, pero que muchas veces ni siquiera eso, ya que el continuo ausentismo de muchos maestros repercute directamente de manera negativa en el aprovechamiento de los estudiantes.
Sin dejar de reconocer que hay muchos maestros de la UV que son estrictamente responsables y éticos, hay otros que son todo lo contrario, asisten a sus clases de la UV cuando les sobra tiempo, ya que su prioridad es atender sus dos o tres empleos más, porque al fin y al cabo nadie les dice nada y de cualquier manera cobran su quincena.
La comunidad universitaria confía en que alguien se ocupe de promover a la mayor brevedad, una evaluación del Modelo Educativo de la UV que demasiada falta le hace; no vaya a ser que esta se lleve a cabo hasta dentro de cinco años más, para que entonces se pueda saber que el MEIF fue infructuoso. Los veracruzanos deseamos no sea así.
[email protected]
A 12 años de haberse implementado, al día de hoy, continúa sin llevarse a cabo una simple evaluación, que por muy sencilla que esta fuera, se podría tener un claro panorama de los resultados que este estuviera arrojando, en beneficio o perjuicio del alumnado.
Lamentablemente los más afectados ante esta situación de apatía hacia el Modelo Educativo son los estudiantes de la UV, que expresado por ellos mismos, uno de los graves problemas que tienen que enfrentar son los horarios quebrados, que aunado al constante ausentismo por parte de muchos maestros, les provoca un fuerte desánimo, a tal grado que muchos se ven obligados a abandonar sus estudios, por los gastos en pasajes extras y comidas fuera de sus casas o pensiones, que tienen que realizar los estudiantes.
Ya en una ocasión el secretario académico de la Universidad Veracruzana, Porfirio Carrillo Castilla, reconoció que el Modelo Educativo Integral y Flexible, MEIF, es deficiente y aceptó que hay ausentismo de parte de los docentes, por lo que los estudiantes reprueban las materias básicas ante la falta de acompañamiento para dichas experiencias educativas. Lo lamentable es que 18 meses después de haber hecho estas declaraciones nada se ha hecho al respecto.
Tal parece que el MEIF de la UV fue creado para otorgar todas las facilidades a los docentes, sin ningún beneficio para los estudiantes, pues los mentores actúan como acompañantes o asesores de los alumnos, pero que muchas veces ni siquiera eso, ya que el continuo ausentismo de muchos maestros repercute directamente de manera negativa en el aprovechamiento de los estudiantes.
Sin dejar de reconocer que hay muchos maestros de la UV que son estrictamente responsables y éticos, hay otros que son todo lo contrario, asisten a sus clases de la UV cuando les sobra tiempo, ya que su prioridad es atender sus dos o tres empleos más, porque al fin y al cabo nadie les dice nada y de cualquier manera cobran su quincena.
La comunidad universitaria confía en que alguien se ocupe de promover a la mayor brevedad, una evaluación del Modelo Educativo de la UV que demasiada falta le hace; no vaya a ser que esta se lleve a cabo hasta dentro de cinco años más, para que entonces se pueda saber que el MEIF fue infructuoso. Los veracruzanos deseamos no sea así.
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