icono menu responsive
Columnas y artículos de opinión
Campos Eliseos
• La leyenda de “El Lazca” • DF vs. Azerbaiyán
Katia D'Artigues
23 de octubre de 2012
alcalorpolitico.com
Un grupo de peritos llegó resguardado por un convoy de la Policía Federal al panteón ejidal San Francisco, de la colonia El Tezontle, en Pachuca, Hidalgo. Su misión, aunque parecía digna de un cuento, no era extraña en este país —donde ya alguna vez un fiscal especial de justicia desenterró una osamenta guiado por una vidente llamada La Paca y presumió que era de una persona que jamás apareció—: acabar de una vez por todas con las dudas de la certera muerte de el-delincuente-buscado.

Se llegó a medidas tan extremas de buscar tejido en el cadáver de un familiar para hacer una prueba de ADN tras una serie de errores imperdonables de los aparatos de justicia… Eso sí, sin que estos errores le costaran la cabeza a alguien.

Todo comenzó cuando la Secretaría de Marina lanzó un comunicado el 8 de octubre por la noche diciendo que tenía “fuertes indicios” —sí, así lo dijo— de que en un lugar paradójicamente llamado Progreso, en Coahuila, habían muerto, un día antes, dos delicuentes al enfrentarse con marinos. Uno de ellos podría ser nada menos que el-delincuente-buscado.


¿Para “fuertes indicios” sacaban un boletín las fuerzas de élite del país, las más informadas? Así fue. Y peor se puso la cosa cuando se supo que ellos, horas antes, sin sospechar que el cuerpo podría ser de él, habían dejado el cadáver en una funeraria del cercano poblado, Sabinas, porque no tenían morgue en el lugar.
La alarma cundió cuando el cuerpo se escapó de la funeraria García. Bueno, es un decir, aunque en Coahuila últimamente todo se les escapa… más bien fue robado. Cuando el dueño de la funeraria dijo que había llegado un comando y se lo habían llevado por la madrugada, cosa que no denunció temeroso, hasta horas después. Oh, oh, fueron atando cabos. Era ni más ni menos que el-delincuente-buscado y ellos ni sabían.

De ahí una retahíla de errores. Las autoridades de Coahuila declararon que el cuerpo tenía 1.60 metros de altura; la DEA que 16 centímetros más: 1.76. Luego que teníauna “enfermedad terminal”, cosa que ellos mismos negaron después diciendo que sólo era, quizá, una lumbalgia. Quizá lo peor fue cuando describieron con detalle los orificios de entrada y de salida de seis balas, cuando en realidad fueron sólo cinco, corrigieron después. “Fue un error de dedo”, aseguraron.

Pero eso sí, seguro segurito que era el-delincuente-buscado… aunque la DEA felicitó al país por la muerte —aunque suene terrible— hasta el día 11 de octubre.


Ahora todo el peso está en los peritos que lo comprobarán con pruebas de ADN. Aunque no entiendo por qué lo hacen si todos están seguros ¡segurísimos! de que es él. ¿O no? FIN.

Todo esto, que haría un buen cuento, contiene puros datos reales. El-delincuente-buscado es nada menos que Heriberto Lazcano Lazcano, líder de Los Zetas. Por lo pronto, en el imaginario mexicano se podría hacer una leyenda de cómo Heriberto Lazcano se encuentra en una isla junto con Manuel Muñoz Rocha, Mario Ruiz Massieu, Amado Carrillo y hasta Pedro Infante. ¿O no?



Desde abril pasado, en una zona del Bosque de Chapultepec, la embajada de Azerbaiyán inició la construcción de un parque, como muestra de la buena relación entre el gobierno de ese país y el nuestro. La semana pasada, ya en la última parte de la construcción de ese parque, colocaron una estatua de Heydar Aliyev, ex presidente de ese país. Para diversos académicos, especialistas en derechos humanos, el gobierno de Aliyev se caracterizó por su poco respeto a los derechos humanos, mientras que para el embajador de ese país en el nuestro el ex presidente fue uno de los “símbolos de su independencia”.

Uno de los argumentos de los opositores a esta escultura es que estuvo frente al poder por más de tres décadas y heredó el cargo a su hijo. Tampoco olvidan que fue secretario del partido comunista, el rojo rojo, de la entonces URSS.

A eso súmele que también se quejan de la incongruencia de las autoridades, debido a que en la Plaza de Tlaxcoaque se colocó una placa alusiva a la muerte de 600 personas en el conflicto entre Azerbaiyán y Armenia.


Cómo estará la polémica que las autoridades de la Secretaría de Obras del gobierno capitalino decidieron crear una comisión especial para destrabar toda esta polémica. La rifa del tigre (y no siberiano) se la llevaron Gabriel Guerra, Gerardo Estrada y Guillermo Osorno, quienes ayer por la tarde tuvieron su primera reunión para evaluar si dejan o retiran la polémica estatua.

Por cierto, ayer, a manera de destrabar la tensión, Gabriel Guerra decía a manera de broma que deberíamos enviar una estatua de Elba Esther Gordillo y Carlos Romero Deschamps a Azerbaiyán… Mmmm. ¡Si no se trata de crear una guerra mundial!


El sexenio que viene. Podría ser el título de una obra más de nuestra política nacional. No me refiero al regreso del PRI a Los Pinos en diciembre próximo, sino a la reelección de dos peculiares líderes sindicales: Elba Esther Gordillo y Carlos Romero Deschamps, del SNTE y del Sindicato de trabajadores de PEMEX, respectivamente.


Ella lo logró al encabezar la única plantilla registrada para renovar la dirigencia, mientras que a él lo eligieron por unanimidad.

Ella, quien llegó en 1989, se mantendrá en el cargo por otros seis años más, es decir, saldrá en el 2018, sumando hasta esa fecha 29 años como líder sindical. Ahora, será presidenta del Consejo General Sindical para el Fortalecimiento de la Educación y para todos aquellos que nos quejamos por la falta de transparencia, crearon el Comité Nacional de Vigilancia, Transparencia y Rendición de Cuentas. ¿Suena bonito, verdad? Sólo que el único objetivo es transparentar, en todo caso, al interior del sindicato.

Y también ya tiene en mente realizar la Ciudad de la Innovación, que se ubicará en la zona de Cuajimalpa, en el DF y albergará la nueva sede sindical, hotel, teatro, universidad y biblioteca para los agremiados de ese sindicato. En tanto que los más de 3 mil asistentes a la 25ª Convención Ordinaria del Sindicato petrolero, reeligieron por unanimidad a Romero Deschamps por otros seis años para estar al frente de esa central obrera, la cual dirige desde finales de los 90. Su nuevo periodo finalizará también en el 2018, cuando termine su fuero como senador por el PRI.


Ayer, las comisiones unidas de Trabajo y Puntos Constitucionales en el Senado la hicieron de emoción.

Se votaron las reservas hechas por el bloque opositor respecto a transparencia y democracia sindical, tema que al PRI le causa urticaria.

Hubo empate de 6 a 6, a favor y en contra, durante tres rondas de votación. Ahora se subirá a pleno, donde podría ganar la mayoría del PRI-PV y la solitaria senadora de Nueva Alianza, Mónica Arriola, para mandar al diablo esas reformas sindicales.


Lo único malo, creo yo, que al parecer, a nuestros legisladores ya no los hacen como antes.

Si al momento de la discusión en la Cámara de Diputados, el presidente de la comisión de Trabajo, Carlos Aceves y del Olmo, se sintió mal; ayer algo raro le pasó a Raúl Cervantes, presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales.

Hay dos versiones: que se intoxicó y se refugió durante más de 20 minutos en uno de los baños; o bien, que tenía demasiada hambre y se tomó un descanso para ir a comer.


El caso es que no aparecía y sin él perdían la votación. Ernesto Gándara, presidente de la Comisión de Trabajo, de plano tomó el celular y casi le gritó, con ese tono norteño que tiene, desde el piso 14 del Senado: "¿Verdad que sí llegas? ¡Verdad que sí llegas!". ¡Con decirle que hasta el séquito de asistentes de Gándara estaban asustados!

Por cierto, si su espos@ es senador y ayer no llegó a dormir, créale. Varios de ellos decidieron rentar habitaciones en hoteles cerca del Senado, ante el temor de que hoy haya bloqueos. Recuerde que Andrés Manuel López Obrador se reúne con el bloque de senadores de izquierda para tirar línea, digo, intercambiar puntos de vista sobre la reforma laboral.



Ahora es Angelino Garzón, vicepresidente de Colombia, quien dio a conocer que tiene cáncer de próstata. Nada bien le ha ido en este año al funcionario colombiano: aun tiene secuelas de un accidente cerebrovascular que lo tuvo fuera de circulación varias semanas.

Pero no solo eso, sino que también a principios de este mes, el presidente Juan Manuel Santos anunció que se sometía a una cirugía para extirparle también un tumor canceroso en su próstata, mientras que el vicepresidente se someterá a las radioterapias.

Garzón lo anunció y dijo:


--No me puedo aferrar al cargo de vicepresidente y menos enamorarme del mismo.

Anunció que basará en la Constitución la decisión de mantenerse en el cargo. Pero Santos y su vicepresidente Garzón no son los únicos funcionarios de primer nivel que se han visto afectados por la aparición de esta enfermedad.

Están los casos del presidente venezolano Hugo Chávez, la presidenta y el ex presidente de Brasil Dilma Rousseff y Luiz Inacio Lula da Silva, respectivamente, así como el ex presidente de Haití, René Preval, y Fernando Lugo, presidente derrocado de Paraguay.


Con este panorama, creo que los mexicanos tenemos una verdadera oportunidad internacional para patentar la dieta de nuestros políticos. ¿Cuántos funcionarios conocemos que hagan público que tienen cáncer o si quiera que tienen gripa, por ejemplo? ¿O será que no estamos dispuestos como opinión pública para saberlo?


Que hay Fidel...Castro para rato. Ese fue el mensaje que mandó desde Cuba el ex presidente vía un texto que apareció en el portal Cubadebate. - ¡Aves de mal agüero! No recuerdo siquiera qué es un dolor de cabeza-aseguró.

Y para que no quedara duda que, a sus 86 años anda vivito y coleando, mandó también dos fotos en las cuales se le ve caminando, pero con bastón. Claro, todo en respuesta a que desde la semana pasada, desde Miami se dispersaron rumores de que el ex mandatario cubano tuvo una embolia cerebral.