icono menu responsive
Columnas y artículos de opinión
Diario de un reportero
Transparencia y confianza
Miguel Molina
15 de noviembre de 2012
alcalorpolitico.com
Y así llegamos a la noche en que la baronesa Onora O'Neill habló sobre la libertad de expresión en un país sacudido por escándalos en la BBC y varias investigaciones sobre la conducta de la prensa en la vida pública y privada.

Uno se pregunta aquí y en todas partes - como la baronesa, que además preside la Comisión de igualdad y derechos humanos en Gran Bretaña - si es necesario y si es conveniente regular a los medios de comunicación.

Como nosotros, la baronesa ha reflexionado sobre el tema, y ha llegado a conclusiones que podrían servir para poner en perspectiva la libre expresión en México y otros países de América Latina como Ecuador, Argentina, Cuba, Venezuela, por nombrar algunos.


En Gran Bretaña, la prensa escrita tiene un régimen de autorregulación que claramente no ha funcionado a juzgar por las transgresiones y los escándalos que hemos visto en los medios durante los últimos dieciséis años, que es el tiempo que tengo de vivir en Londres.

Al mismo tiempo, hay un rechazo a la regulación independiente, "pero la autorregulación se limita casi siempre al interés particular", señaló la baronesa durante un debate sobre el tema en la Universidad Goldsmiths, en el sureste de Londres.

Para ella, la libertad de expresión es uno de los derechos universales del hombre, pero los medios no representan la libertad de expresión de los individuos, sino la del poder, y lo que comunican los medios no es necesariamente lo que expresan las personas.


"La comunicación falla si no tiene accesibilidad, transparencia y verificabilidad", dice. "Lo que se puede y debe regular es el proceso de la información y no su contenido... aunque eso no significa ignorar el principio democrático de una prensa libre e independiente".

A riesgo de simplificar las reflexiones de la filósofa, que ha enfatizado la importancia de la confianza en una sociedad justa, lo que necesitan los medios - y los públicos a los que en teoría sirven los medios - es transparencia, porque la transparencia engendra confianza.

Si uno aplica este principio a la prensa mexicana, se dará cuenta del profundo sentido de las palabras de la baronesa O'Neill, y de la necesidad de adoptar medidas que permitan "replantear una cultura de medios en la que propagar sospechas se ha convertido en una actividad rutinaria" para recobrar la confianza del público.


La transparencia a la que se refiere la baronesa se aplica igual a los pagos recibidos (si el medio o el periodista recibió o puede recibir algún beneficio económico por la información que publica o deja de publicar) que a los pagos hechos.

Pero también se refiere a la transparencia sobre intereses del periodista o del medio en la información que se publica o se deja de publicar, y a los errores cometidos y la celeridad en la aclaración de esos errores.

En igual medida es importante la transparencia sobre la mayoría de las fuentes del medio o del periodista - lo que no implica revelar el origen de información delicada, ni poner en peligro la integridad física de las personas.


Hace diez años, la baronesa O'Neill habló sobre la confianza en la Serie Reith, un ciclo de conferencias que organiza la BBC para reflexionar sobre el periodismo y el papel de los medios en la sociedad. Y entonces advirtió que los medios son tan importantes que no se les puede dejar a ellos solos la responsabilidad de lo que hacen.

"Si la libertad de prensa se justifica por la manera en que salvaguarda y promueve la comunicación diversa, inteligible, honesta y verificable que apoya a la democracia, es enteramente justificable que se tomen medidas que garanticen que los medios sirvan de hecho para estos fines".

Poco después, sin que nadie supiera por qué, sonó la alarma de incendio y tuvimos que desalojar la sala de conferencias.


Afuera, en la noche fresca, bebimos vino tibio y hablamos sobre el Congreso de Veracruz, que va a mantener reuniones a puerta cerrada con los secretarios del gobierno antes de que los funcionarios comparezcan en público para hablar de lo que se ha hecho en los dos años de la presente administración.

Y pensamos, aunque no lo dijimos en voz alta, que las reflexiones de la baronesa sobre los medios y los periodistas - sobre todo en materia de transparencia y de confianza - tendrían que aplicarse también a otros actores de la cosa pública, en Veracruz como en muchas partes, porque una cosa trae la otra.

(Si usted habla inglés y está interesado en las conferencias de la baronesa O'Neill en el ciclo Reith, puede leerlas o escucharlas aquí: http://www.bbc.co.uk/radio4/reith2002/lecture1.shtml).