El quórum se integra, en las Cámaras del Congreso de la Unión, con la asistencia de la mitad más uno de sus miembros. Esto cuando inicia la sesión, pero si en el transcurso de la misma o en el proceso de una votación se detecta que no existe esa mitad más uno, entonces se rompe el quórum y se detiene la sesión.

Ayer, durante la sesión del Senado, al atardecer, el presidente de la directiva Ernesto Cordero Arroyo, por sus calcetines, dio por terminada la sesión cuando habían votado 64 y Raúl Gracia, senador azul, haría lo propio y se mantenía el quorum. Pero Cordero tenía prisa por irse, pensando que todavía en Los Pinos despachaba Felipe Calderón, y que tenía que ir a verlo.


Cerró la sesión y dejó a todos enmuinados. En el PAN no hay cabeza que mande y por eso Cordero se pasó por debajo de las suelas a Gustavo Madero y su firma en el Pacto por México. Igual los del PRD; mandaron por un tubo a Jesús Zambrano y se unieron con los azules para impedir la aprobación de la reforma de la Administración Pública que plantearon las bancadas del PRI.

Está visto que las firmas en los pactos no son atendibles una vez que tanto en el PAN como en PRD, los antiguos jefes ya se han ido a sus casas. Calderón y Amlo andan en otros espacios y sus bancadas andan en el monte. Por eso los altibajos de los votos que amacoyan Cordero y sus lobitos, y el inestable Miguel Barbosa, que siendo afín a los Jesuses, no jala en el senado con ellos, que son los que firman los pactos.

Es tanta la torpeza de Cordero como presidente de la Mesa Directiva del Senado, que pasó por alto que este fin de semana se presentaría el presupuesto de egresos de la Federación, y si no hay desaparición de dependencias, se tienen que asignar dineros públicos, mientras existan legalmente. O quizá por ello y su paso por la SHCP, le llevó a cancelar una sesión violando el reglamento de la propia Cámara, para dejar sin sustento al presupuesto federal.


Esto, ahora que no tiene remedio, tendrá que verse hasta el próximo martes.

Los opositores al PRI estaban furiosos porque cuatro de sus miembros se “atoraron” por allí, en alguna comida, o en alguna cantina y por eso no llegaron a la Sesión.

Sintieron que perdían la votación de ayer por la tarde y por eso operó Cordero para romper el quórum, “su quórum”, y clausuró la sesión.


Algo tendrá que hacerse con Emilio Gamboa Patrón.

No valen los lamentos y las excusas.

Se rompe el orden del procedimiento y allí siguen la SSP y la SFP, sin cabeza, sin funciones y sin dinero.


PD. Desde el exilio voluntario FCH ¿no pondrá en orden a sus engendros legislativos? Allí están sus lobitos, haciendo destrozos de los pactos que se firman, para su lucimiento personal. Debe irse de la presidencia del senado.