A menos de tres semanas de que se oficialicen las designaciones de sus precandidatos a la diputación local y a las 212 alcaldías del estado, los priistas parecen no comprender que si a su partido le va mal en las elecciones del 7 de julio próximo, a su líder real, el gobernador Javier Duarte de Ochoa, le podría ir más que peor.

 

Y no sólo al jefe del Poder Ejecutivo sino a los miembros de su gabinete y, además, a los aspirantes del PRI que desde ahora buscan sucederlo en la gubernatura dentro de tres años.

 

Nada más habría que imaginarse el escenario de confrontación que a partir de noviembre de este año hasta la sucesión estatal de 2016 se dará de manera sistemática y estridente en la próxima Legislatura local si es que, como ha trascendido ya, el ex candidato de Acción Nacional a gobernador, Miguel Ángel Yunes Linares, deveras tiene amarrado el sitio número uno de la lista de candidatos plurinominales de la alianza PAN-PRD al Congreso estatal.

 

A esta hipotética situación agréguese la posibilidad de que el PRI no llegara a tener mayoría simple en la LXIII Legislatura. ¿Resistirán el gobernador Duarte y sus colaboradores el permanente torpedeo de Yunes Linares y de las bancadas de los partidos blanquiazul y del sol azteca? ¿Los secretarios de despacho seguirán disfrutando de los mismos “días de campo” en sus próximas comparecencias con motivo de las glosas de los tres informes de gobierno siguientes?

 

Y es que el inminente arribo del ex director del ISSSTE al Congreso del estado no es simplemente para ocupar un cargo de elección popular que ya desempeñó en 1980 como diputado local y en el Congreso de la Unión en 1991 y 2003, sino que es parte de su estrategia política y propagandística para reposicionarse como el más fuerte aspirante de la oposición a la gubernatura en 2016.

 

Al parecer, Yunes Linares ha decidido encartarse por última vez en la búsqueda del gobierno de la entidad luego de que sus hijos, el senador Fernando Yunes y el ex coordinador estatal de Oportunidades, Miguel Ángel Yunes Márquez, no han logrado aún mostrar él empaque político que exige una candidatura de esta magnitud.

 

Fernando, por ejemplo, se apanicó hace poco ante una manifestación orquestada en Los Portales de la ciudad de Córdoba, donde apenas se aprestaba a iniciar una conferencia de prensa. Su hermano Miguel Ángel, en cambio, busca gobernar por segunda vez el municipio de Boca del Río, en cuya administración 2007-2010 afloraron casos de nepotismo, corrupción, obra pública de mala calidad y una abultada deuda.

 

La alianza electoral entre PAN y PRD que se da por primera vez en la historia de Veracruz es, al parecer, un ensayo de la coalición opositora que seguramente se dará también dentro de tres años en la sucesión gubernamental que buscará encabezar Yunes Linares.

 

Y no se necesita de la mejor pitonisa para adivinar que ante la recuperación del PRI de la Presidencia de la República, Acción Nacional y el partido del sol azteca –ya sin el liderazgo del ex candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, quien junto con otros ex perredistas ha decidido formar el nuevo partido del Movimiento Regeneración Nacional (Morena)– han comenzado a formar alianzas estatales que podrían continuar en la elección federal intermedia de 2015 y, obviamente, en la sucesión del presidente Enrique Peña Nieto en el 2018.

 

Por eso están por visitar la entidad Diódoro Carrasco Altamirano y Manuel Camacho Solís, dos ex priistas –el primero ex gobernador de Oaxaca y el segundo ex regente del Distrito Federal–, que ahora desde el PAN y PRD vienen impulsando desde el sexenio antepasado los gobiernos de transición y coalición en los estados.

 

Pero en Veracruz hay priistas de visión tan corta que no pueden ver más allá de sus intereses políticos personales y de grupo. El riesgo es que sus ambiciones individuales y facciosas pueden provocar en julio próximo una sonora derrota al partido tricolor que le complicaría también el resto del sexenio la gobernabilidad al jefe en turno del priismo veracruzano.

 

En Martínez de la Torre, por ejemplo, la pugna por la candidatura municipal está confrontando radicalmente a los grupos priistas, pues se quiere imponer al diputado local del Panal, Ernesto Callejas Briones, cuando en las encuestas figura mejor posicionado el presidente del Comité Directivo Municipal del PRI, Eduardo Sánchez Macías, quien desde hace más de tres años viene construyendo su candidatura.

 

Anteayer, líderes sectoriales que apoyan a Sánchez Macías, encabezados por el regidor tercero Jorge Luis Herrera Espinoza, acordaron movilizar este viernes 8 al CDE del PRI en Xalapa a más de un millar de militantes para exigir al dirigente estatal Erick Lagos que frene la pretendida imposición de caciques locales.

 

El “fuego amigo” proviene de los mismos priistas y esto aún no comienza, acusan.

 

 

El que andaba ayer por la ciudad de México es el economista tuxpeño Inocencio Yañez Vicencio, ex presidente de la Fundación Colosio Veracruz, pues le fue tomada oficialmente la protesta como delegado de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) junto con otros seis representantes de otras entidades.

 

 

Ayer, en Palacio de Gobierno, el gobernador Javier Duarte de Ochoa reconoció el talento de los alumnos del Colegio de Bachilleres del Estado de Veracruz (COBAEV) que ganaron la XXII Olimpiada Nacional de Biología.

 

Los cuatro estudiantes de la institución educativa que en el estado dirige Antonio Ferrari Cazarín retornaron a nuestra entidad con una medalla de oro, dos de plata y una de bronce, después de obtener los puntajes más altos en la justa nacional celebrada el pasado mes de enero en la capital queretana.

 

 

Por cierto, hablando de otro joven veracruzano valioso. Ayer, un diputado federal veracruzano fue quien dio la postura de la bancada priista en San Lázaro durante el inicio del segundo periodo de sesiones: se trata de Fernando Charleston Hernández.

 

Se sabe que el ex subsecretario de Planeación de la Sefiplan recibió la encomienda del coordinador de la numerosa bancada del PRI, Manlio Fabio Beltrones Rivera.

 

Charleston ha mostrado disposición, disciplina y trabajo al interior del grupo legislativo: además de presidir la Comisión de Desarrollo Social, forma parte de la comisión Especial del caso Monex y fue designado como miembro de los diputados priistas que analizaron la iniciativa preferente de Contabilidad Gubernamental.

 

Al subir a tribuna este miércoles, Charleston anunció que trabajarán en temas de gobernabilidad y democracia, crecimiento, empleo y competitividad; así como seguridad, justicia y paz, además de desarrollo incluyente y sustentable.

 

El diputado federal por el distrito de Coatepec dijo que la actual legislatura ha mostrado productividad y reconoció la disposición de las fuerzas políticas para llegar a acuerdos y sacar adelante reformas como la laboral y educativa.