28 de junio de 2013
alcalorpolitico.com
Si en el nivel nacional los panistas están protagonizando un espectáculo vergonzoso por la burda disputa del dinero entre los senadores afines al ex presidente Felipe Calderón y el grupo de legisladores alineado con el dirigente Gustavo Madero Muñoz, aquí en Xalapa algunos ex beneficiarios de la alternancia en el poder presidencial que han quedado desempleados tras el retorno del PRI a Los Pinos, cual émulos del legendario político priista César “El Tlacuache” Garizurieta, también se niegan a vivir en el error fuera del presupuesto público.
Durante doce años, desde que Vicente Fox ganó la Presidencia de la República en el 2000, estos militantes del PAN que ahora quieren ganar a como dé lugar la alcaldía de la capital veracruzana, han ocupado cargos legislativos pero sobre todo puestos en la administración pública federal en los que han sido públicamente cuestionados por su presunto enriquecimiento ilícito.
Por ejemplo, el candidato del partido blanquiazul a la alcaldía, Abel Cuevas Melo, quien ha sido citado a declarar por la Procuraduría General de la República (PGR) sobre el escandaloso caso de la llamada Estela de Luz –que según la Auditoría Superior de la Federación su proyecto original fue recortado 3 mil 400 metros cuadrados y su precio ¡triplicado!– fue dos veces diputado federal, coordinador de la Agenda de Audiencias y Eventos Presidenciales, Oficial Mayor de la Secretaría de Gobernación, coordinador general de Administración de la Presidencia de la República y hasta principios de este año delegado estatal de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), representación que por segunda ocasión ocupó en la entidad veracruzana.
En la planilla del PAN fue sembrado en la Regiduría Primera Martín Victoriano Espinoza Roldán, quien hasta hace un par de meses se desempeñaba también como delegado en Veracruz pero de la Secretaría de Gobernación.
El ex representante estatal de la SEGOB es compadre de grado de Agustín Basilio de la Vega, quien fue el único delegado veracruzano que saltó del sexenio de Fox al de Calderón Hinojosa como titular del Centro de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) en el estado. Basilio es actualmente el representante del PAN ante el Instituto Electoral Veracruzano (IEV), y como tal anunció el pasado lunes 24 el retiro de Acción Nacional de la Comisión Plural Estatal de Preservación del Entorno Político de Equidad en la Competencia Electoral en Veracruz, instalada el pasado 21 de mayo por los líderes de los nueve partidos políticos con representatividad en la entidad y por el gobernador Javier Duarte de Ochoa, teniendo como testigo del gobierno federal al coordinador de la Secretaría de Gobernación en Veracruz, Alberto Amador Leal.
Esta Comisión Plural forma parte de los 11 compromisos del adéndum al Pacto por México que dos semanas antes habían signado el presidente Enrique Peña Nieto y los dirigentes nacionales del PAN, PRI y PRD. El pretexto del blanquiazul para justificar su salida de este acuerdo en Veracruz fueron los hechos de violencia registrados circunstancialmente en los municipios de Coxquihui y Tierra Blanca en contra de militantes y candidatos panistas.
Directivos ambos de Acción Nacional en la entidad durante el sexenio del gobernador Patricio Chirinos Calero –muy cercano al presidente Carlos Salinas de Gortari, en cuyo sexenio el PAN fue el más beneficiado con las llamadas “concertacesiones”, mediante las cuales le fueron entregadas las primeras gubernaturas del país, como la de Baja California Norte en 1989, y luego en 1994 las principales alcaldías de Veracruz, como las del puerto jarocho, Córdoba, Orizaba, Papantla, etcétera, cuya entrega operó directamente desde la Secretaría de Gobierno Miguel Ángel Yunes Linares, hoy influyente factor de poder al interior del blanquiazul–, Basilio de la Vega y Cuevas Melo le estarían apostando a la presión y provocación para intentar ganar en la mesa de negociación política y en los tribunales lo que sienten ya muy difícil conseguir en las urnas el 7 de julio próximo.
Y es que conforme se acerca la fecha de la elección, el candidato del PAN a la alcaldía y sus estrategas hacen más patente su desesperación, pues las más recientes encuestas colocan a Cuevas Melo hasta el tercer lugar, rebasado ligeramente por la candidata del partido Movimiento Ciudadano, Dulce María Dauzón, quien figura en el segundo sitio.
Esta situación parece haberlos alterado a tal grado que últimamente estarían incurriendo en actos de provocación que en cualquier momento pueden generar violencia como la denunciada por ellos mismos en los municipios de Coxquihui y Tierra Blanca, y que usaron de pretexto para abandonar la Comisión Plural.
Y es que ha trascendido que los candidatos del PRI a la alcaldía y a la diputación local por el distrito urbano de Xalapa, Américo Zúñiga y Ricardo Ahued, respectivamente, han sido perseguidos y provocados por militantes del PAN durante sus recorridos de campaña en algunas calles y colonias capitalinas.
Según comentan operadores del partido tricolor, han detectado infiltrados de Acción Nacional que buscan tener acceso a la agenda de Américo y Ahued para enviar después a grupos de agitadores, una estrategia para deslegitimar el proceso electoral y cuya autoría intelectual le atribuyen los priistas a Yunes Linares por el estilo porril que ha caracterizado a su ex compañero de partido.
Para el ex candidato a gobernador y la dirigencia nacional del PAN, Xalapa representa la joya de la corona por ser la capital del estado que electoralmente es el más importante del sureste mexicano. En cambio, para Cuevas Melo y Basilio de la Vega el ayuntamiento xalapeño significa una fuente de poder para su sobrevivencia política y económica.
Y es que hasta en la misma cúpula estatal del partido blanquiazul comentan ruborizados los compromisos hechos descaradamente por Cuevas Melo con capos de grupos de poder al interior del PAN que el propio candidato nativo de Coatepec benefició como delegado estatal de la Sedesol y que ahora estarían financiando su campaña en Xalapa.
Uno sería el diputado federal por el distrito de Huatusco, Víctor Serralde, motejado por sus correligionarios como el “Rey de los Pisos Firmes” por ser el contratista más beneficiado en Veracruz con este programa de la Sedesol durante los sexenios presidenciales de Fox y Calderón; otro de los patrocinadores del coatepecano es el alcalde de Tantoyuca, Joaquín Guzmán Avilés, en cuyo municipio el PAN llegó a tener más miembros activos y adherentes de todo el país, cientos de los cuales figuran también en los padrones del programa federal Oportunidades.
Precisamente como candidato a Regidor Segundo fue colocado Heriberto Ponce, un joven de escasos 29 años de edad nativo de Tantoyuca e incondicional de Guzmán Avilés, quien le pagó sus estudios en Xalapa. Ponce era hasta hace poco secretario de Afiliación del CDE del PAN.
En la Regiduría Cuarta, el actual regidor panista Omar Miranda impulsó a Fernando Márquez, apadrinado también por el diputado Serralde. Y es que el edil xalapeño y el diputado federal de Huatusco están hermanados por un jugoso negocio en común: la maquila de la propaganda para los candidatos del PAN.
La Regiduría Primera, que en todos los partidos políticos es la más disputada porque es una posición segura gane o pierda el candidato a alcalde, le fue asignada al compadre de Basilio, quien como delegado de la SEGOB encubrió en Veracruz las denuncias que inclusive algunos correligionarios como el ex diputado federal Marcos Salas Contreras, ahora postulado por el PRD a la alcaldía de Xalapa, hicieron en su momento en contra del entonces delegado de la SCT y ahora del ex representante de la Sedesol.
Y es que aparte del estrecho parentesco político entre Basilio y Martín Victoriano, existen otras ligas mucho más fuertes entre ambos panistas por una intrincada red de intereses económicos y políticos. Según versiones periodísticas, el hilo de esta madeja apuntaría hacia Eloy Hernández Aguilar, quien era encargado de la Residencia General de Carreteras Alimentadoras y, al mismo tiempo, presidente de la Asociación Mexicana de Ingeniería en Vías Terrestres A.C. (AMIVTAC). A través de su cuñado Jorge Roldán García –quien es familiar del ex delegado de la SEGOB y candidato a Regidor Primero, el cual a su vez es hermano de Gilberto Espinoza Roldán, jefe de la Oficina Técnica de la Residencia General de Carreteras Alimentadoras de la SCT en Veracruz– se asignaron múltiples contratos de manera directa a empresas constructoras que durante la administración del actual representante del PAN ante el IEV fueron sospechosamente favorecidas.
Hernández Aguilar despertó suspicacias porque inexplicablemente habría comprado de “cash” varias propiedades en Xalapa, como una casa en la colonia Miguel Alemán y otras en los fraccionamientos residenciales Monte Magno y La Marquesa, valuadas en varios millones de pesos, así como diversos vehículos de lujo que se duda haya podido adquirir sólo con sus ingresos lícitos.
¿A estas manos “impolutas” confiará su Ayuntamiento el electorado xalapeño los próximos cuatro años? Ya veremos qué deciden el 7 de julio próximo. Por lo mientras, según indican las encuestas, tal parece que el desencanto por el candidato blanquiazul habría hecho que una importante cantidad de votantes xalapeños que simpatizaban con el PAN haya virado su preferencia hacia otras opciones como la que representa la señora Dauzón, de Movimiento Ciudadano, y que otros miles de electores abiertamente antipriistas estén decididos a votar mejor por personajes como el famoso “Candigato Morris”.
Durante doce años, desde que Vicente Fox ganó la Presidencia de la República en el 2000, estos militantes del PAN que ahora quieren ganar a como dé lugar la alcaldía de la capital veracruzana, han ocupado cargos legislativos pero sobre todo puestos en la administración pública federal en los que han sido públicamente cuestionados por su presunto enriquecimiento ilícito.
Por ejemplo, el candidato del partido blanquiazul a la alcaldía, Abel Cuevas Melo, quien ha sido citado a declarar por la Procuraduría General de la República (PGR) sobre el escandaloso caso de la llamada Estela de Luz –que según la Auditoría Superior de la Federación su proyecto original fue recortado 3 mil 400 metros cuadrados y su precio ¡triplicado!– fue dos veces diputado federal, coordinador de la Agenda de Audiencias y Eventos Presidenciales, Oficial Mayor de la Secretaría de Gobernación, coordinador general de Administración de la Presidencia de la República y hasta principios de este año delegado estatal de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), representación que por segunda ocasión ocupó en la entidad veracruzana.
En la planilla del PAN fue sembrado en la Regiduría Primera Martín Victoriano Espinoza Roldán, quien hasta hace un par de meses se desempeñaba también como delegado en Veracruz pero de la Secretaría de Gobernación.
El ex representante estatal de la SEGOB es compadre de grado de Agustín Basilio de la Vega, quien fue el único delegado veracruzano que saltó del sexenio de Fox al de Calderón Hinojosa como titular del Centro de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) en el estado. Basilio es actualmente el representante del PAN ante el Instituto Electoral Veracruzano (IEV), y como tal anunció el pasado lunes 24 el retiro de Acción Nacional de la Comisión Plural Estatal de Preservación del Entorno Político de Equidad en la Competencia Electoral en Veracruz, instalada el pasado 21 de mayo por los líderes de los nueve partidos políticos con representatividad en la entidad y por el gobernador Javier Duarte de Ochoa, teniendo como testigo del gobierno federal al coordinador de la Secretaría de Gobernación en Veracruz, Alberto Amador Leal.
Esta Comisión Plural forma parte de los 11 compromisos del adéndum al Pacto por México que dos semanas antes habían signado el presidente Enrique Peña Nieto y los dirigentes nacionales del PAN, PRI y PRD. El pretexto del blanquiazul para justificar su salida de este acuerdo en Veracruz fueron los hechos de violencia registrados circunstancialmente en los municipios de Coxquihui y Tierra Blanca en contra de militantes y candidatos panistas.
Directivos ambos de Acción Nacional en la entidad durante el sexenio del gobernador Patricio Chirinos Calero –muy cercano al presidente Carlos Salinas de Gortari, en cuyo sexenio el PAN fue el más beneficiado con las llamadas “concertacesiones”, mediante las cuales le fueron entregadas las primeras gubernaturas del país, como la de Baja California Norte en 1989, y luego en 1994 las principales alcaldías de Veracruz, como las del puerto jarocho, Córdoba, Orizaba, Papantla, etcétera, cuya entrega operó directamente desde la Secretaría de Gobierno Miguel Ángel Yunes Linares, hoy influyente factor de poder al interior del blanquiazul–, Basilio de la Vega y Cuevas Melo le estarían apostando a la presión y provocación para intentar ganar en la mesa de negociación política y en los tribunales lo que sienten ya muy difícil conseguir en las urnas el 7 de julio próximo.
Y es que conforme se acerca la fecha de la elección, el candidato del PAN a la alcaldía y sus estrategas hacen más patente su desesperación, pues las más recientes encuestas colocan a Cuevas Melo hasta el tercer lugar, rebasado ligeramente por la candidata del partido Movimiento Ciudadano, Dulce María Dauzón, quien figura en el segundo sitio.
Esta situación parece haberlos alterado a tal grado que últimamente estarían incurriendo en actos de provocación que en cualquier momento pueden generar violencia como la denunciada por ellos mismos en los municipios de Coxquihui y Tierra Blanca, y que usaron de pretexto para abandonar la Comisión Plural.
Y es que ha trascendido que los candidatos del PRI a la alcaldía y a la diputación local por el distrito urbano de Xalapa, Américo Zúñiga y Ricardo Ahued, respectivamente, han sido perseguidos y provocados por militantes del PAN durante sus recorridos de campaña en algunas calles y colonias capitalinas.
Según comentan operadores del partido tricolor, han detectado infiltrados de Acción Nacional que buscan tener acceso a la agenda de Américo y Ahued para enviar después a grupos de agitadores, una estrategia para deslegitimar el proceso electoral y cuya autoría intelectual le atribuyen los priistas a Yunes Linares por el estilo porril que ha caracterizado a su ex compañero de partido.
Para el ex candidato a gobernador y la dirigencia nacional del PAN, Xalapa representa la joya de la corona por ser la capital del estado que electoralmente es el más importante del sureste mexicano. En cambio, para Cuevas Melo y Basilio de la Vega el ayuntamiento xalapeño significa una fuente de poder para su sobrevivencia política y económica.
Y es que hasta en la misma cúpula estatal del partido blanquiazul comentan ruborizados los compromisos hechos descaradamente por Cuevas Melo con capos de grupos de poder al interior del PAN que el propio candidato nativo de Coatepec benefició como delegado estatal de la Sedesol y que ahora estarían financiando su campaña en Xalapa.
Uno sería el diputado federal por el distrito de Huatusco, Víctor Serralde, motejado por sus correligionarios como el “Rey de los Pisos Firmes” por ser el contratista más beneficiado en Veracruz con este programa de la Sedesol durante los sexenios presidenciales de Fox y Calderón; otro de los patrocinadores del coatepecano es el alcalde de Tantoyuca, Joaquín Guzmán Avilés, en cuyo municipio el PAN llegó a tener más miembros activos y adherentes de todo el país, cientos de los cuales figuran también en los padrones del programa federal Oportunidades.
Precisamente como candidato a Regidor Segundo fue colocado Heriberto Ponce, un joven de escasos 29 años de edad nativo de Tantoyuca e incondicional de Guzmán Avilés, quien le pagó sus estudios en Xalapa. Ponce era hasta hace poco secretario de Afiliación del CDE del PAN.
En la Regiduría Cuarta, el actual regidor panista Omar Miranda impulsó a Fernando Márquez, apadrinado también por el diputado Serralde. Y es que el edil xalapeño y el diputado federal de Huatusco están hermanados por un jugoso negocio en común: la maquila de la propaganda para los candidatos del PAN.
La Regiduría Primera, que en todos los partidos políticos es la más disputada porque es una posición segura gane o pierda el candidato a alcalde, le fue asignada al compadre de Basilio, quien como delegado de la SEGOB encubrió en Veracruz las denuncias que inclusive algunos correligionarios como el ex diputado federal Marcos Salas Contreras, ahora postulado por el PRD a la alcaldía de Xalapa, hicieron en su momento en contra del entonces delegado de la SCT y ahora del ex representante de la Sedesol.
Y es que aparte del estrecho parentesco político entre Basilio y Martín Victoriano, existen otras ligas mucho más fuertes entre ambos panistas por una intrincada red de intereses económicos y políticos. Según versiones periodísticas, el hilo de esta madeja apuntaría hacia Eloy Hernández Aguilar, quien era encargado de la Residencia General de Carreteras Alimentadoras y, al mismo tiempo, presidente de la Asociación Mexicana de Ingeniería en Vías Terrestres A.C. (AMIVTAC). A través de su cuñado Jorge Roldán García –quien es familiar del ex delegado de la SEGOB y candidato a Regidor Primero, el cual a su vez es hermano de Gilberto Espinoza Roldán, jefe de la Oficina Técnica de la Residencia General de Carreteras Alimentadoras de la SCT en Veracruz– se asignaron múltiples contratos de manera directa a empresas constructoras que durante la administración del actual representante del PAN ante el IEV fueron sospechosamente favorecidas.
Hernández Aguilar despertó suspicacias porque inexplicablemente habría comprado de “cash” varias propiedades en Xalapa, como una casa en la colonia Miguel Alemán y otras en los fraccionamientos residenciales Monte Magno y La Marquesa, valuadas en varios millones de pesos, así como diversos vehículos de lujo que se duda haya podido adquirir sólo con sus ingresos lícitos.
¿A estas manos “impolutas” confiará su Ayuntamiento el electorado xalapeño los próximos cuatro años? Ya veremos qué deciden el 7 de julio próximo. Por lo mientras, según indican las encuestas, tal parece que el desencanto por el candidato blanquiazul habría hecho que una importante cantidad de votantes xalapeños que simpatizaban con el PAN haya virado su preferencia hacia otras opciones como la que representa la señora Dauzón, de Movimiento Ciudadano, y que otros miles de electores abiertamente antipriistas estén decididos a votar mejor por personajes como el famoso “Candigato Morris”.