Global Finance Integrity (GFI), despacho especializado en investigación sobre financiamiento ilícito, corrupción y lavado de dinero, incluyó al exgobernador Javier Duarte de Ochoa en el listado de políticos de alto nivel en México acusados de invertir recursos de procedencia ilícita en el mercado de bienes raíces en Estados Unidos.
En el informe titulado “Acres of Money Laundering: Why U.S. Real Estate is a Kleptocrat’s Dream (Acres de lavado de dinero: por qué el mercado inmobiliario de EU es el sueño de los cleptócratas)”, los investigadores Lakshmi Kumar, director de Política de GFI y Kaisa de Bel, analista de GFI, analizan los casos de los exgobernadores Duarte de Ochoa, de Veracruz; Tomás Yarrington, de Tamaulipas y José Murat, de Oaxaca; así como el gobernador en funciones de esta misma entida Alejandro Mural y el ahora preso Gerardo García Luna, exsecretario de Seguridad Pública.
En lo referente a Duarte de Ochoa, el informe lo vincula a la adquisición de 90 propiedades en México, España y Estados Unidos de 2006 a 2014; y para invertir en bienes raíces en suelo estadounidense utilizó abogados y socios como testaferros para crear una red de empresas fachada en Texas, Delaware y Florida.
“Su imperio incluye edificios comerciales en Florida, una mansión de 7.6 millones de dólares pagada en efectivo”, indica; además, se incluyen 30 casas que se compraron y se vendieron infinidad de veces para ocultar el origen del dinero.
En cuanto a Oaxaca, el informe señala a José Murat Casab, exgobernador de la entidad de 1998 a 2004 y al gobernador en funciones, Alejandro Murat Hinojosa, de poseer bienes inmuebles por encima de los seis millones de dólares en Nueva York, Utah y Florida.
Éstas fueron compradas por medio de personas allegadas a los Murat, siendo registradas a nombre de amigos y familiares, incluso un hijo de Murat que era menor de edad al momento de la compra-venta.