Ir a Menú

Ir a Contenido

Sección: Cultura

Con fandango, despiden en Cosoleacaque al maestro Mario Zúñiga Palma

- Falleció el destacado jaranero, normalista y músico fundador del Ballet Folklórico de la UV

- Este domingo será inhumado en el Panteón de esa ciudad

Arturo Benjamín Pérez Xalapa, Ver. 15/09/2019

alcalorpolitico.com


Click para ver fotos
Qué mejor despedida para el maestro Mario Zúñiga Palma, que amanecer con fandango, en el patio de su casa en Cosoleacaque, a la que asistió medio pueblo, entre familiares y amigos que acudieron a darle el último adiós.

Don Mario Zúñiga Palma es uno de los hombres veracruzanos que, como profesor de educación primaria, entregó gran parte de su vida al servicio educativo, en una época en que a las escuelas se llegaba a caballo o en lancha.

Se significó tanto su trabajo en la zona de Minatitlán que llegó a ocupar el cargo de supervisor escolar, muy apreciado por los docentes, época en que no cualquiera llegaba a ese puesto, aquel que lo obtenía, tenía que ser previamente reconocido como una persona proba, de amplia solvencia moral, cualidades que él tenía.



Nació en Minatitlán, un 26 de abril de 1939. Estudió en Xalapa, donde formó parte de la generación Reforma, de la Escuela Normal Veracruzana Enrique C. Rébsamen. Es ahí donde forma parte del grupo musical que acompañaba las actuaciones del Ballet Folklórico que, años después, se convertiría en el Ballet Folklórico de la Universidad Veracruzana.

Destacó por ser músico versátil, jaranero y decimero, que se convirtió en un referente de la música jarocha. Con el Ballet Folklórico recorrió el continente. Desde Argentina, hasta Estados Unidos, donde se presentó en el Carnegie Hall, en Nueva York, logro que contados, muy contados artistas, obtienen.

Tocó al lado de Alberto De la Rosa, Saúl Hernández, Antolín Guzmán y Delfino Martínez, todos ellos, como don Mario, se han convertido en míticos personajes del son jarocho, que con su décima y forma de contar sus versos, llevaron a la música popular veracruzana a niveles del Carnegie Hall.



En una entrevista de don Andrés Barahona Landoño, publicada en la sección Cultura de Diario de Xalapa, cuenta el arpista Rubén Vázquez Domínguez de la ocasión en que se conocieron estos personajes que formaron el grupo musical del Ballet Folklórico de la Escuela Normal Veracruzana. Suceso que se dio en una fiesta celebrada en casa de Manuel Bartlet, primera vez que tocó al lado de Alberto De la Rosa, que resultó ser compañero de la facultad en la que estudiaba y el responsable de que conociera a Saúl Hernández y a Mario Zúñiga Palma.

Doña Ana Ríos Fararoni, con sus hijos; Ana Hazel, Mario y Mariana recibieron el pésame de la gente que amaneció, en el patio de su casa, en el emotivo fandango, en que además de la música, se repartió el café, con «piquete» de whisky, sirvieron popo, el tequila, los tamales o el café.

Y los jaraneros amanecieron.
«ya me voy a despedir
porque así debe de ser
les pido sigan gozando
de este rato de placer
porque Dios sabe hasta cuándo
nos volveremos a ver.»



Descansa en Paz, don Mario Zúñiga Palma.
26 de abril de 1939, 14 de septiembre 2019