Como es tradición, los trabajadores de la cuchara grande celebran su día.
Los cohetes anuncian el término del trabajo para pasar a la celebración, antes en lo alto de la construcción colocaron la Cruz con flor de mayo y bugambilia.
Los albañiles dejaron un rato la cuchara para compartir el pan y la sal.
Carnitas, arroz, mole, pollo, tortillas, cerveza, refresco y pulque.
De acuerdo a los trabajadores de la construcción, es un trabajo digno, muy pesado pero que es redituable para mantener a su familia.
Los salarios dependen del conocimiento, hay ayudantes, maestros y encargados de la obra, quienes perciben de acuerdo al trabajo realizado en la semana.
Señalan que sus hijos no seguirán la tradición del oficio, están estudiando para ser profesionistas, "acá se sufre y se sufre mucho".