Carlos Brito Gómez, presidente de la Comisión de Procesos Internos, y Lillian Zepahua García, presidenta del CDE del PRI en Veracruz, reconocieron que existe una tendencia favorable para la fórmula de Marlon Ramírez y Arianna Guadalupe Ángeles Aguirre para ocupar la dirigencia del partido en Veracruz y la Secretaría General.
Ante los señalamientos en contra de Ramírez, por su supuesta cercanía con la familia del exgobernador panista Miguel Ángel Yunes Linares, la presidenta estatal del tricolor dijo que al final se demostró que fue la militancia la que decidió, apuntando que el candidato pidió licencia al cargo de regidor del ayuntamiento de Veracruz, gobernador por Fernando Yunes.
Añadió que aunque se acusó compra de votos, no se denunció nada ante el Comité, aunque los candidatos inconformes están en su derecho de impugnar si así lo consideran. “Lo más probable es que se den las impugnaciones”, dijo.
Con el 90 por ciento del cómputo de los votos, dijo que se trató de un proceso limpio que se pondrá como ejemplo por la dirigencia nacional, a cargo de Claudia Ruiz Massieu y los resultados oficiales estarán el martes 30 de diciembre.
Igualmente, reconoció que se registró el voto de más de 30 mil militantes, aunque en total hay más de 160 mil inscritos en el padrón, es decir, menos del 20 por ciento.
Brito Gómez aseveró que se trató de una jornada ejemplar, pues se instalaron todas las mesas de votación y no se registraron incidentes, añadiendo que el PRI está “más vivo” de lo que sus adversarios piensan.