Continúan en albergues 130 habitantes de Nogales

La noche de ayer durmieron en albergues un promedio de 130 habitantes del municipio de Nogales y ahí permanecían la mañana de este martes; esto a consecuencia de que en la zona de “El Infiernillo”, donde se registró uno de los atentados a los ductos de PEMEX, aún arden los restos de combustible.

Al respecto, el director de Protección Civil de este sitio, Pablo Ramos Huerta, indicó que en la zona de la Congregación de Balastrera, se prendió una llama que era del combustible que debía terminarse de quemar, pero por lo sucedido esa madrugada y más aún por lo acontecido el pasado junio del 2003, (cuando explotaron los ductos de PEMEX y se registró una barrancada), es que la gente se alarmó y prefirió irse a los refugios,

“Hasta anoche había quema del excedente que existía en el ducto, y esto generó temor. Hasta ahora (por la mañana) sí existe un albergue habilitado todavía, es en Rancho Viejo ahí llegaron anoche, la gente y autoridades se han sumado para atender a estas personas.”

De igual forma, puntualizó que a primeras horas de esta mañana, ya el fuego estaba controlado, ya no había flama. Aunque la SEDENA sigue resguardando el sitio y con ello facilitando las maniobras que personal de PEMEX realiza.

Con referencia al río “Chiquito”, citó que el problema con este afluente es que resultó contaminado de manera considerable, además dijo que aun se continúan percibiendo el olor a combustible, puesto que éste se regó en el río y en su cauce va pasando por distintas zonas, sin embargo esto no es un riesgo para la población, “aún llega a la colonia “El Cerrito” y “Lázaro Cárdenas”.

Señaló que esperarán el informe que haga la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente, (PROFEPA), ya que desde ayer estuvo haciendo visitas e inspecciones sobre las afectaciones que pudieron causarse con las explosiones en este municipio.