La ideología sobre el amor hacia el ser amado que ha partido a la otra vida, es la mayor causa por la cual la gente decide no cremar a sus difuntos, a pesar de que ésta forma sea a final de cuentas menos costosa, comentó Martín David Espinoza Administrador del Cementerio “Juan de la Luz Enríquez”, de esta ciudad.
“Básicamente esto se debe a cuestiones de ideologías, todavía no se ha difundió bien, en qué consiste la cremación, además que la gente no soporta el que a su difunto lo quemen, algunos expresan que prefieren un proceso natural, es decir que en la tierra se desintegren”, añadió que en repetidas ocasiones las personas le han dicho que el amor por su ser que ha muerto es tan grande que no podrían soportar que éste fuera quemado.
Resaltó que aunado a este aspecto va muy de la mano el económico, pues la gente piensa que es más barato el sepultar a su difunto, que cremarlo, “a primera vista es más barato, pero con el paso del tiempo es más caro, porque se tiene que pagar alguien que lo esté cuidando y limpiando de por vida, hay que mandar hacer una loseta, y a la larga sale más caro”.
Asimismo manifestó que es más cómodo y práctico para los encargados de los panteones, tener limpia siempre un área de nichos, ya que ocupan menos espacio, puede estar en el interior de una habitación que será sólo dedicada para estos. El costo por nicho es de 3 mil pesos pero a perpetuidad, es decir que la gente no tendrá que volver a pagar nunca.
Dijo que en el año dos mil se inauguró una zona en el panteón “Juan de la Luz Enríquez”, con capacidad para 102 nichos, pero a la fecha aún quedan 30 espacios disponibles, “después de siete años, se han vendido setenta y dos, lo cual indica que son comprados por año alrededor de diez”.