La pugna en la administración del agua que se suministra a más de dos mil habitantes de la congregación Chicola, en Mariano Escobedo, cuya toma es compartida con una empresa cervecera de la región, afectó ya durante una semana, con la suspensión del servicio.
El problema, señalan habitantes del lugar, es que la empresa Cuauhtémoc-Moctezuma incumplió con una solicitud que hizo el Comité administrador del servicio y en represalia le cerraron las válvulas, afectando también a los pobladores.
No obstante al hecho, el alcalde Ramiro Páez Muñoz, precisó que la situación, aunque le atañe al municipio, es un problema en el que los habitantes, al ejercer usos y costumbres, manejan autonomía con la administración del recurso y son ellos quienes lo deben resolver, pues no es un problema técnico de desabasto.
Y es que vecinos, molestos por la falta de agua, increparon al encargado del Comité y amagaban con estallar un conflicto en la zona donde la empresa cervecera construye un tanque de agua, del que se supone se les suministrará de agua a los habitantes.
El administrador del Comité de Agua, Néstor Valente Rosas, no está de acuerdo con la obra, porque asegura afectará el suministro y, a través de mesas de trabajo, ha dialogado con personal de la cervecería, pero sin llegar a un buen acuerdo.
No obstante, el compromiso fue que con la obra los vecinos tendrán agua de más, se acabará el desabasto y tandeo y ya no habrá necesidad de válvulas y, por ende, no se va a poder regular y el Comité podrá seguir cobrando.
Se conoció que tras la reunión con personal de la cervecería, se solicitó una fuerte cantidad de dinero, pero la empresa no accedió y de ahí sobrevino el problema, pues se trata de una tubería de ocho pulgadas de agua que se suministra a la citada empresa.