De continuar el actual déficit de lluvias habrá sequía en la primavera de 2018

De prolongarse el actual déficit de lluvias a la segunda quincena de octubre, crece el riesgo para la entidad de experimentar un severo estiaje y desabasto de agua en la primavera de 2018, alertó el subcoordinador de Fenómenos Atmosféricos de la Secretaría de Protección Civil, José Llanos Arias.

Observó que el pronóstico indica una falta de lluvias durante agosto, septiembre y octubre, por lo que de continuar dicha tendencia, la primera consecuencia inmediata traería una canícula casi imperceptible.

Recordó que dicho fenómeno es una ligera sequía presente a mitad de la temporada de lluvias; pero al experimentar ésta un déficit, la “canícula”, “sequía estival” o “veranillo” no resultaría evidente para la población.



“El pronóstico es persistente de un verano con déficit de lluvias”, indicó José Llanos y agregó el hecho de que los siguientes meses se prevén temperaturas por arriba de los valores promedio.

“Si esto se cumple, podríamos tener un problema en cuanto al desabasto de agua en los siguientes meses y especialmente para el año entrante y la época de estiaje 2018”, advirtió.

Por lo anterior, Llanos Arias pidió no descuidar los pronósticos meteorológicos en los siguientes meses y que en todo caso, esta previsión no resulta definitiva ya que depende de las condiciones del tiempo que se presenten a futuro.