Demuestra que son más peligrosos los “caballeros” al manejar; son muy arbitrarios

Sr. Director:

Agradezco la publicación de este texto respecto a la forma de conducir de nosotras las mujeres.

Yo soy mujer, y he manejado un auto.

Mi experiencia manejando en Xalapa es que más allá del abultado tráfico, la falta de una adecuada cultura vial hace una pesadilla estar al volante.

No creo que esa carencia sea exclusiva de las mujeres. En mi caso, muchas veces los caballeros invadieron mi carril sin poner las direccionales y en no más de una ocasión tuve que dar volantazos porque el de enfrente sin poner las intermitentes se detuvo abruptamente.

Varias veces me he encontrado con gente que no se conforma con hacer del arroyo vehicular una tierra sin ley, sino que se lucen en insultos a las damas. Un hombre al volante no es menos peligroso que una mujer, por el contrario, ambos corren el mismo peligro y además, representan el mismo peligro para los demás. Un auto en movimiento es como un arma y depende mucho tanto de la pericia como de la responsabilidad del conductor.

En el puente Bicentenario me rebasaban los hombres con vehículos circulando a más de 120 km/hr, cuando la velocidad límite es de 80 km/hr, eso sin contar con que si yo, respetuosa del límite me echaban las luces, en el de alta o en la de baja, como si fuera autopista, como si se tratara de la competencia del día. Lo mismo ocurre en otras avenidas, ¿y dónde están los agentes de Tránsito?.

Muchos vehículos son estacionados justo donde se terminan empinadas subidas, donde no hay visibilidad, eso está prohibido por el Reglamento de tránsito, ¿y donde están los caballeros de tránsito?, muchos hombres no tienen ni tantito sentido común estacionándose afuera de farmacias, bares, discotecas, escuelas, oficinas, "tantito" porque van a comprarse algo o a saludar al compadre. Desquician el tráfico, y cuidado y una mujer se atreva a decirles algo porque salimos casi golpeadas.

Manejar es una actividad muy bonita, yo lo disfruté mucho, pero creo que el machismo, la cerrazón, y sobre todo la iracundidad, la inmadurez, y la estupidez de muchos caballeros les hacen apuntar a la mujer como responsable del caos vehicular.

Aún sigue habiendo tipos que creen que las mujeres no podemos o no debemos conducir un auto, increíble pero cierto. No se equivoquen señores. Es una responsabilidad compartida, y será mejor que acepten su parte.

Gracias.
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