Desalojan a anciana de 80 años de su casa en “El Patio Bravo”, en Veracruz

Con cerca de 200 años, con paredes y techos que reflejan ese Veracruz amurallado de la época de la colonia, “El Patio Bravo”, está destinado a ser borrado de la memoria de los porteños, debido a la voracidad y ambición de empresarios constructores. Hoy una mujer de más de 80 años de edad, junto con su hija y dos nietos fueron lanzados a la calle en una orden de desalojo. Unas 9 familias que todavía habitan ese popular patio ven que su destino será el mismo.

Personal actuante del Juzgado Segundo de Primera Instancia en materia Civil de la ciudad de Veracruz, acompañado por elementos de la Policía Estatal y personal de la Inmobiliaria y Constructora Santos, el lanzamiento de su vivienda, a la señora Leonor Velázquez, de 86 años de edad.



Esta mujer vivió desde su infancia en el “Patio Bravo”, cuando sus padres llegaron a rentarlo, creciendo, recopilando recuerdos y afianzando amistades.

El apoderado legal, David Martínez Vázquez, de la referida inmobiliaria, acompañó a los actuarios del juzgado, junto con guardias de seguridad privados, unos cargadores y albañiles para el desalojo.

Primero sacaron todas las pertenencias al patio, para luego desprender la protección de la ventana y puerta metálica, no sin antes causarle serios daños a la pared del inmueble que representa parte de la historia de Veracruz, protegido incluso por el INAH.



Luego fueron con el techo y a marrazos, tiraron los ladrillos y adoquines antiguos, sin importarles la preservación de los edificios antiguos de Veracruz.

El propietario del lugar es el empresario Ruiz Ortiz, quien por medio de la inmobiliaria, les promovió un juicio a los vecinos del patio por rebeldía al negarse a pagar las rentas de los inmuebles y a presentarse a las citas en los juzgados civiles.

Al respecto, el señor René Novoa Segura, abogado de las familias que habitan el Patio Bravo, aseveró que jamás dicho juzgado les dio citas para comparecer a los juzgados, haciendo todo amañado por debajo del agua, motivado por el dinero.



El pleito legal data ya de 10 años y uno a uno ha ido lanzando a los habitantes del Patio Bravo, sin importar que el patio esté reconocido como edificio histórico, por ser uno de los lugares más antiguos de la ciudad.

Las nueve familias que todavía siguen ahí dieron cobijo a la señora Leonor Velázquez, junto con sus pertenencias y nietos.

Ella dijo que ese tipo de cosas no se valen, no se tientan el corazón para lanzarlos, pues tan siquiera le hubieran dado tiempo para buscar a dónde irse.



La mujer de más de 80 años de edad, pide a las personas, que le den un sitio a dónde vivir, pues sólo tiene a su hija y sus dos nietos y no puede valerse por sí misma, ya que está mal de sus piernas.