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Duranguense y reggaeton, música de baja calidad: Benito Castro

- Estos géneros reflejan el gran problema de cultura y educación en el país, criticó el cantante - Participará en el homenaje a Agustín Lara en el WTC

Ignacio Carvajal Garc?a Boca del R?o, Ver. 02/09/2008

alcalorpolitico.com

Para el cantante Benito Castro el hecho que la actualidad se consuman ingentes dosis de música con pasito duranguense o reggaetón refleja la pobreza cultural de los mexicanos.

En entrevista con este medio electrónico posterior a la presentación del elenco que participará en el homenaje a Agustín Lara, realizada en el Word Trade Center, Castro lamentó también que iconos como el autor de “María Bonita” se den con tan poca frecuencia en la historia.

Y explicó que esto no depende al mayor o menor número de escuelas de música aperturadas por el gobierno, pero aceptó habría mayor capacidad de apreciación al trabajo de compositores si en el nivel básico se implantaran un programa completo de educación musical.

- ¿Por qué con la existencia de centros culturales del gobierno federal y estatal, no se ha dado otra figura de la estatura de Agustín Lara o su remplazo?, se cuestiona.

- La verdad… esos son garbanzos de a libra, no es común que nazcan Siqueiros, o gente como Octavio Paz. Como Lara, son garbanzos de a libra y no son producto de una escuela; sin embargo, la existencia o no de estos centros culturales si afecta en la capacidad de la gente para apreciarlos. Hay cosas muy buenas, pero o tiene difusión porque estamos en un mercado en donde lo único que importa es el dinero, el talento no interesa.

- ¿Tienen responsabilidad las grandes disqueras?

- Por su puesto, las casas disqueras tienen mucho que ver y también dueños de radiodifusoras, ahora se compra el tiempo, y es lo que se negocia, como tiempo aire de comercial, ya no hay el hecho de que la gente decida las canciones que poner al aire.

- ¿Por qué el boom de la música norteña, del pasito duranguense y el reggaeton?

- No es música mala, hay cosas rítmicas. De la norteña impacta mucho el corrido, sus historias, y están bien elaboradas, son rescatables, pero las otras, casi no tiene grado de dificultad. Como esa de reggaeton, baby te quiero, woou, baby te quiero woou…

Castro se refiere al éxito musical del reggetonero Nigga (despectivo para negros en habla inglesa), que con unas cuantas estrofas mal rimadas, repletas de lugares comunes y música monótona, ocupa aún los primeros lugares en ventas y estaciones de radio.

Esta situación habla de la falta de cultura, y a demás, la gran difusión que le dan los empresarios del ramo, opinó: “Para producir cosas de esas, cuestan tres pesos, y deja millones de dólares, los productores dicen pues nos vamos sobre ese mercado para que haya dinero.

Pero acota: “Pero si hubiera cultura musical, no esta música no sería tan aceptada. Le costaría mucho trabajo entrar al mercado.

- ¿La educación en el país en relación con la apreciación musical, como se encuentra?

- No existe. En la primaria no aprendes un instrumento, lo más que llegan a enseñarte son las estudiantinas, rondallas para que aprendas a toca la guitarra y “manbrú se fue a la guerra”. Esto me aburría, hasta la secundaría que vimos solfeo, pero en realidad no se ve avance. Nunca se pasa de las notas del pentagrama. De métricas y cosas así no se ve nada.

CULTURA DE ILEGALIDAD

Benito Castro dice no haber participado en la marcha Iluminemos México, como otros artistas que desfilaron para pedir un ya basta a la violencia y delincuencia. Estuvo muy ocupado en los preparativos del festival larista; sin embargo, consideró que en estos momentos la inseguridad es uno de los problemas más graves del país:

- En particular, en México tenemos una cultura por la delincuencia, es ancestral. Todos hemos compartido la corrupción, en menor o mayor escala, hemos dado la mordida o pedido al coyote que nos eche la mano para un trámite y no pagar ni esperar el mismo tiempo.

“Hemos creado la cultura de la mordía y hecho millonarios a quienes no deberían serlo, de manera ilícita hemos colaborado con grandes fortunas… remover este lodazal para sacar el agua limpia costará muchas vidas y trabajo”.

- ¿Qué pasa en su gremio con la delincuencia, como artistas siempre son blanco fácil?

- Creen que tenemos mucho. Recuerdo el caso de mi amigo José María Napoleón, al que le saquearon su casa, y él no tiene mucho; se ha pasado la vida arrastrando los pies en el escenario para hacerse de cosas, de su casa, y de un dinero, pero que sin duda no puede compararse al que podría juntar un político, desde el anonimato, en un año de gestión y sin ser blanco de estos ataques.