Tras la destitución del tesorero municipal de Coatzintla Enrique Fernández Gómez, por presuntas irregularidades en la administración pública, el regidor primero Ramón Villegas Olivares dijo que no están en contra del gobierno municipal sino a favor del orden y la legalidad que debe prevalecer en toda administración pública.
Señaló que la decisión de remover al tesorero municipal en sesión de cabildo se tomó para poner un freno a las atribuciones que el encargado de las finanzas realizaba funciones que no le competían.
El regidor Villegas afirmó que el tesorero decidía las obras a realizarse, la entrega de apoyos para las comunidades y toda una serie de gestiones que le competían al Ayuntamiento en pleno.
Añadió que en ausencia de la Alcaldesa el tesorero asumía más responsabilidades por su propia cuenta lo que provocó que se acentuara la inconformidad por el cuerpo edilicio hasta que decidió poner un freno a la situación.
Puntualizó que el tesorero les habría echado fuera del gobierno municipal a los empleados de confianza tanto de él como de los demás regidores.
Por otra parte la alcaldesa Nayeli del Valle Toca calificó como arbitrarias y mal sustentadas las acciones del síndico y regidores quienes forzaron al gobierno a erogar 6 millones de pesos para cubrir las demandas laborales de las administraciones pasadas.
Añadió que los ediles pretenden desviar los recursos del presupuesto destinados a la obra pública, la cantidad de 7 millones de pesos de los 9 programados para su aplicación a favor de los diferentes sectores de la sociedad.
La alcaldesa Nayeli del Valle Toca, agregó que tanto síndico como regidores se pusieron de acuerdo para forzar al Ayuntamiento a pagar 6 millones por demandas laborales y 1 millón 542 mil pesos por concepto de adeudos del ISR que se arrastran desde el año 2004 cuando fungió como alcalde, César Ulises García Vázquez, y no se descontaron dichos impuestos a los trabajadores.