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Sección: V?a Correo Electr?nico

¡El CREEVER, una herencia invaluable!

Fernando F. Cancela Xalapa, Ver. 09/12/2010

alcalorpolitico.com

A todos los discapacitados
del mundo.

Lo observé desde que salía hacia la recepción por el elevador del edificio. A pesar de que era un frío amanecer, a las 6:50 horas del miércoles 24 de noviembre, se podía observar desde lo alto del nosocomio todo lo que se encontraba a la vista con claridad. El pequeño discapacitado mental, acostado en su camilla rodante que había sido colocada por Saúl Rivera a un paso del ventanal, veía con su mirada triste y perdida, toda esa magnificencia natural que se encontraba a la vista.

Aunque desde el Centro de Rehabilitación y Educación Especial de Veracruz se puede ver gran parte de Xalapa, la mirada del pequeño, parecía que se encontraba concentrada en un punto exacto. Quizá el campo de fútbol de la Universidad Anahuac, el caserío de los fraccionamientos, los edificios, la zona boscosa, o simplemente el verde horizonte que se apreciaba a lo lejos; -no se-, pero me conmovió la nobleza de su ser y su personalidad.

Todavía no se su nombre, pero no es difícil darse cuenta que es sumamente sensible a los estímulos y al calor humano; su joven madre, quien a simple vista se nota que no rebasa los treinta y cinco años de edad, se conduce hacia él para alimentarlo en la boca; es entonces cuando uno reflexiona que el amor de una madre no conoce el cansancio, porque su amor no tiene límites ni fronteras.

El CREEVER es un espacio increíble, solo los grandes ingenieros y arquitectos podrían tener un cálculo sobre la inversión que se realizó para construir un hospital que cuenta con la más alta tecnología para dar cabida a todas las personas que padezcan de alguna discapacidad; todo ello, gracias a una lucha constante que llevó a cabo la Señora Rosa Borunda de Herrera, esposa del exgobernador de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán. Bien pregona el dicho popular que “detrás de un gran hombre, hay una gran mujer”.

Sus colaboradores, médicos especialistas, enfermeros, terapistas, trabajadoras sociales, recepcionistas, de seguridad e intendencia del centro de rehabilitación, es afectuosa y amable en el trato hacia sus pacientes. Desde la Doctora Flora Estela Fuentes López, quien funge como una eficiente directora por tener los más nobles conocimientos en la medicina física y rehabilitación, hasta el más humilde trabajador, son una prueba palpable de sensibilidad y entusiasmo.

En otro punto del CREEVER, las amorosas terapistas asisten a mi “unicornio azul”, mi pequeño hijo René de once años de edad, quien como muchos otros autistas, gozan de las terapias de lenguaje y de los estímulos que produce ese completo centro sensorial, localizado en un punto más de su inmensidad.

Destaca sobremanera un aparato conocido como ”Lokomat”, (moderno e innovador equipo robotizado que ayuda en el proceso de marcha de los discapacitados). Me enteré que fue adquirido con la derrama económica que se generó por el concierto de Elton John en la ciudad de Veracruz en mayo pasado; que es de tecnología alemana y tuvo un costo de 8 millones de pesos. Seguramente, este aparato cambiará la vida de muchos niños y adultos imposibilitados para caminar.

En el “Lokomat”, el paciente se coloca frente a un espejo y viendo a través de una computadora cómo camina, se corrige totalmente la forma en que pisa y apoya sus pies, logrando superar su limitación a nivel físico y cerebral. Sirve para pacientes con Parálisis Cerebral, Síndrome de Down, amputados, con prótesis y alteraciones de tipo neurológico que limitan el movimiento.

Además de ser único en su tipo en todo Latinoamérica, el CREEVER, brinda una rehabilitación integral y de calidad a niños, jóvenes y adultos con discapacidad motriz, cerebral y sensorial. Sabedor de que para adquirir los sofisticados aparatos, se realizaron diversos eventos artísticos, musicales, culturales, así como la venta de diversos productos.

Pero lo más relevante de todo, es la generosidad y el altruismo de la sociedad veracruzana que permitió recaudar los fondos y hacer realidad el sueño iniciado en el 2007 con la colocación de la primera piedra de algo que fue diseñado para atender anualmente a más de 40 mil personas de escasos recursos, de todo el Estado de Veracruz.

La obra que dejaron Fidel Herrera Beltrán y Rosita Borunda de Herrera es de vital importancia, sin embargo, para quienes tenemos la oportunidad de visitar por lo menos dos veces por semana un espacio tan completo y agradable como lo es el CREEVER; sabemos sin lugar a dudas que lo que ellos nos dejaron, es y será por siempre, una herencia invaluable.

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