El día de La Cruz, tradicional festejo de albañiles y constructores

Mientras en España el día de la Cruz es una celebración religiosa que se festeja principalmente en Granada con bailes, cruces y flores por todas las casas; en México, es la fiesta de los albañiles y constructores, quienes “levantan la cruz” y hacen fiesta con pirotecnia.

De acuerdo a la obra, hay quienes construyen altares, los adornan con flores, velas y papel de muchos colores y empiezan la celebración al mediodía con la comida y licor, patrocinado por el dueño de la construcción o el que paga la raya cada sábado.

La cruz se levanta en lo más alto de la obra y se adorna con flores y desde ahí se prenden los cohetes y empieza la fiesta. Hoy 3 de mayo

los maestros albañiles en México están de fiesta, en todas las construcciones se puede observar una cruz recientemente adornada y colocada con fe que brindará protección a todos los albañiles.

Es común que luego de mediodía se vea sentados en una improvisada mesa de alguna obra negra, a los llamados “maestros de obra”, convivir con los pasantes, peones, arquitectos o ingenieros. La tradición cuenta que es el encargado de la obra quien agasaja durante este día a quienes ayudan a construir su sueño, por lo que la comida abarca desde tamales hasta barbacoa o pollo, acompañado de -en algunos casos- una cerveza, dependiendo de si lo permite o no el “Patrón”.

Los albañiles son trabajadores especialistas de la construcción, encargados de edificar con ladrillos, varillas y cemento, aquellos edificios que albergarán casas, oficinas o locales. Los trabajos que desempeñan varían según las distintas categorías de albañiles, de lo que también dependerá del salario que perciban; los hay quienes preparan y organizan el área donde se va a trabajar, hay incluso quienes se ocupan del mantenimiento de maquinarias y equipo de trabajo; así como de brindar todos los aditamentos necesarios para -en caso de estar a grandes alturas- contar con las medidas de seguridad necesarias.



Está también el encargado de preparar el mortero, el hormigón, las pastas y adhesivos, el que fabrica los ladrillos, tabiques y tabicones, el encargado del armado, el “maestro electricista” quien se encarga de las obras de fontanería y electricidad. También se encuentra el que levanta los muros, apertura las zanjas, demuele paredes y hasta quien recoge los escombros. Toda una compleja estructura es la que normalmente no se ve, cuando una casa o edificio están terminados. Pero su construcción requirió de especialistas en colocar ventanas y puertas, rejas, hasta lo más importante que es nivelar el terreno donde será edificada la construcción.

Y aunque los sueldos son bajos (la mayoría se paga por día), los sueldos van desde 2,000 a la quincena hasta 700 pesos (según el rango), se pueden encontrar albañiles que trabajan desde los 10 años y que aprendieron el duro oficio cuando eran llevados por sus padres a las construcciones. Un empleo artesanal que no podrá ser suplido por las máquinas, y cuyo festejo, cada 3 de mayo, recuerda a todos aquellos que con su esfuerzo construyeron esos espacios por donde transitamos y vivimos a diario.