“No me voy a echar para atrás, tenemos que aplicar la ley, si existen anomalías se procede”, aclaró el alcalde electo de Medellín, Marcos Isleño, en torno a si solaparía al presidente actual de su mismo partido, el PRI, Rubén Darío Lagunes.
Admitió que tiene conocimiento de muchos problemas como falta en el servicio de recolección de la basura, alumbrado público y el despido permanente de los empleados municipales.
El alcalde electo de extracción priísta dijo que no va a solapar cualquier anomalía que se detecte y actuará conforme a la ley en contra del actual alcalde, Rubén Darío Lagunes.
Dijo que al iniciar su gestión espera impulsar nuevos proyectos y no retomará los de su antecesor, a lo mejor los podrá revisar en el segundo o tercer año, pero él entrará con los que impulsó en la campaña y son los que le solicitó la población.
En estos momentos no sabemos cómo está la situación financiera del ayuntamiento realmente, se dicen muchas cosas, pero claro si se da alguna anomalía, se procede, en eso no tiene porque haber cambios, además así lo piden los ciudadanos y si no existe, tampoco le vamos andar buscando.
Reconoció que por lo menos veinte trabajadores que fueron despedidos en días recientes lo buscaron y dijo que en caso de ser necesario se les podría recontratar sobre todo para aprovechar la experiencia que tienen.