Empresas deben garantizar seguridad sanitaria en “nueva normalidad”

Después de 10 semana de la Jornada Nacional de Sana Distancia, este sábado concluye para dar pasado al retorno a la nueva normalidad y a la reapertura de las actividades económicas bajo un esquema seguro, escalonado y responsable y mediante un protocolo de seguridad sanitaria que garantice, tanto al personal como al público en general, no correr ningún tipo de riesgos.

Si a partir del lunes las medidas que se han establecido para las empresas y centros de trabajo que regresan a la actividad no están activadas o sólo en un porcentaje determinado, los trabajadores deberán reportarlo al Instituto Mexicano del Seguro Social.

Entre las medidas que deberán establecerse en las empresas y los centros de trabajo a partir del próximo lunes para reducir el riesgo de contagios, destacan los filtros sanitarios para medir la temperatura corporal del personal, la distribución de gel a base de alcohol al 60%, uso obligatorio de cubrebocas y sanitización de las instalaciones.



Si algún trabajador presentara temperatura de 37.5 grados o mayor o se le detectaran signos de alguna enfermedad respiratoria, se deberá canalizar a un área de estancia y aislamiento, se le proporcionará cubrebocas y será remitido a su domicilio o a los servicios médicos y se les asistirá para el trámite de su incapacidad digital.

Se proporcionará al personal equipo de protección personal, como cubrebocas (de preferencia lavables), lentes protectores y caretas.

Se tendrá que evitar el hacinamiento en espacios y garantizar la disponibilidad permanente de agua potable, jabón, papel higiénico, gel a base de alcohol y toallas desechables.



Deberán establecer horarios alternos de comida, baños, uso de casilleros y actividades cotidianas para reducir el contacto entre personas; incrementar el número de unidades de transporte para el personal sin que haya hacinamiento al interior, uso de cubrebocas y una ventilación natural del transporte.

Al interior de las instalaciones, tendrá que colocarse señalética en las áreas comunes, como sanitarios, vestidores, casilleros, cafeterías, comedores y salas de junta, con marcas en el piso, paredes y/o mobiliario, recordando la distancia mínima de metro y medio entre personas.

Para el personal catalogado en el grupo de alto riesgo: mujeres embarazadas o lactando, con obesidad, adultos mayores de 60 años, con diabetes e hipertensión descontrolada, VIH, cáncer, con discapacidades, trasplantes, enfermedad hepática, pulmonar, con trastornos neurológicos o del neurodesarrollo (epilepsia, accidentes vasculares, distrofia muscular y lesión de médula espinal), se recomienda:



Que antes del regreso o dentro del primer mes de haber regresado al trabajo, se le otorguen las facilidades para acudir a consulta con su médico familiar o médico de la empresa para evaluar su control y fortalecer las medidas higiénico-dietéticas, estilos de vida y farmacológicas.

Las personas trabajadoras con diabetes, hipertensión y cardiopatías, deberán acudir a su médico para revisión, al menos cada 3 meses.

Así, a partir del lunes, iniciará la etapa de reapertura socioeconómica mediante un sistema de semáforo de riesgo epidemiológico semanal por regiones, estatal o municipal, que determinará el nivel de alerta sanitaria y definirá qué tipo de actividades están autorizadas retornar a la actividad.



El semáforo tendrá tres niveles: Alto, Medio y Bajo y será medido y dictado por la autoridad federal.