En Agua Dulce, panteón del ejido Díaz Ordaz, opera con decenas de tumbas con restos expuestos

Desde el año pasado por lo menos dos decenas de tumbas se encuentran abiertas en el panteón del ejido Díaz Ordaz, sin que los familiares de las personas ahí sepultadas se acerquen para remediar la situación en que se encuentran sus difuntos.

Los restos se mantienen expuestos al sol y la lluvia, acelerando su descomposición e incluso la profanación de los restos por parte de animales carroñeros, además del problema de salud pública que esto significa.

Los panteoneros contratados por las autoridades ejidales, señalan que con las festividades de Día de Muertos algunos familiares se acercarían para remediar el estado en el que se encuentran los sepulcros.

Sin embargo, nadie reclamó o solicitó reparaciones, lo que denota que estas tumbas permanecen abandonadas, por lo cual será necesario buscar una solución por parte de las autoridades de salud y gubernamentales.

Se pretende solicitar a la Jurisdicción Sanitaria XI que retire los restos humanos y sean nuevamente sepultados en fosas comunes, pues no existe pago de perpetuidad que obligue al ejido a mantener los espacios ocupados.

Así también se buscará un acercamiento con los dueños de las funerarias locales para que éstos elaboren bóvedas que cumplan los requerimientos, pues en la mayoría de los casos, las tapas colapsan a los pocos días de haber sido construidas, a consecuencia de la utilización de materiales de mala calidad.