En riesgo cientos de familias asentadas en márgenes de ríos de la zona de Orizaba

Como consecuencia de la desatención de pasadas administraciones, cada año se ponen en riesgo por las crecidas de ríos de respuesta rápida poco más de 300 familias establecidas en sus márgenes.

El no respetar la zona federal ocasionó que lo asentamientos humanos se establecieran tanto en los márgenes del río la Carbonera, Blanco y Chiquito que atraviesan los municipios de Nogales, Ciudad Mendoza y Río Blanco.

De 2011 a la fecha, cada temporada de lluvias ha dejado pérdidas económicas incuantificables, como resultado del desbordamiento de dichos ríos, señala en su reporte la coordinación de Protección Civil de la región de Orizaba, a cargo de Luis Palma Déctor.

En Nogales, Carlos de la Garza Villela, Director de Protección Civil municipal, ha establecido un sistema de monitoreo en la parte alta del río La Carbonera y río Chiquito que ayude a dar la voz de alerta hasta con 40 minutos de anticipación gracias al apoyo de Base 3000.

Señaló que el riesgo es permanente entre los meses de julio a septiembre en que se registran las crecidas de lluvias, deslaves y temidas barrancadas que ponen en riesgo a más de 120 familias de tres municipios de la región establecidas en los márgenes.

En Río Blanco, la coordinación de PC supervisa unas 100 viviendas establecidas en los márgenes del río La Carbonera que en 2012 desbordó, dejando pérdidas cuantiosas y el deceso de tres integrantes de una familia como consecuencia de la caída de un árbol.

Existen innumerables asentamientos irregulares de familias en colonias y comunidades donde se han registrado deslaves, e inundaciones, lo cual pudiera ocasionar desenlaces fatales.

En La Carbonera, unas siete familias que en el año 2003 fueron reubicadas por el Gobierno del Estado a una zona segura, de tres años a la fecha regresaron a vivir en las márgenes del mismo río, por lo cual la autoridad municipal deberá ejercer acciones para liberarlas de dicha zona y evitar con ello que se pongan en riesgo.