Entregan invasores de colonia Trópico de la Rivera, de Coatza, 7 hectáreas tomadas

Invasores de la colonia Trópico de la Rivera, hicieron entrega este viernes, de las siete hectáreas que desde el pasado mes de febrero habían tomado de forma ilegal para construir sus viviendas.

En rueda de prensa dieron a conocer que la decisión fue tomada tras asesorarse con un abogado.

Dieron a conocer que a principio de año cuando ingresaron al predio, el alcalde, Joaquín Caballero Rosiñol, les dio su respaldo, sin embargo, tras el desalojo ocurrido a principios de julio, no ha querido darles la cara.



“El 14 de febrero invadimos el predio y al frente estaban: Javier Alonso Arcos, Oscar Molina, Javier Solís, Mónica Torres, Juan Ruiz y Judit Jiménez Méndez, quienes lucraron con los que no tenemos y nos dieron falsas esperanzas”, aseguró, Alma Solís, invasora.

Expuso que al día siguiente, Caballero Rosiñol arribó al lugar y se comprometió a no desalojarlos, lo que les dio falsas esperanzas ya que meses después fueron retirados con lujo de violencia.

De los líderes, dijo, se desentendieron de los hechos cuando las más de 250 familias comenzaron a preguntar cómo iba la situación legal y económica de los terrenos.



Por ello tomaron la decisión de buscar respaldo, fue cuando el entonces candidato a la Diputación Federal por el Distrito 11, Gonzalo Guízar Valladares, a través de Jorge Reyes les ayudó a tocar puertas a nivel estatal.

Con ello se logró hacer trámites de solicitud e investigaciones porque los terrenos, a su decir, llevan 35 años en abandono, no obstante, nunca hubo respuesta del Gobierno Estatal a través de las oficinas de Gobernación y Patrimonio.

“El 12 de julio fuimos desalojados con lujo de violencia, prepotencia, abuso de autoridad, ahí participaron elementos de la Fuerza Civil, Ministerial, Estatal, privada, el Ipax y un grupo de choque”, recordó.



La dama informó que después de lo ocurrido decidieron tomar la carretera Coatzacoalcos-Minatitlán para hacer públicos los abusos. “En el sitio fue agredido el fotoperiodista, Sergio Balandrano, por parte del hijo del pastor Javier, hecho del que nos deslindamos y solidarizamos”.

Luego de haberse asesorado jurídicamente decidieron la madrugada del viernes entregar las siete hectáreas que habían invadido. Aseguró que se quieren deslindar de responsabilidades y sobre todo, entablar pláticas con las autoridades para obtener terrenos y poder contar con una vivienda digna.

“No queremos problemas, nos engañaron, pero queremos entablar diálogos, somos gente trabajadora, no lo queremos regalado”, finalizó.