Familias se niegan a abandonar sus hogares en Tamiahua pese a inundación

El alcalde de Tamiahua, Martín Cristóbal Cruz, solicitó al Gobierno del Estado de Veracruz la Declaratoria de Emergencia para su municipio ante las lluvias e inundaciones de este miércoles.

Informó que el Ejército Mexicano y la Secretaría de Marina ya evacuan a los afectados y hasta el momento 30 familias han sido trasladadas a cinco refugios temporales activados, pero preocupan las familias que se niegan a abandonar sus hogares.

Las familias que se niegan a evacuar habitan en las comunidades de Palo Blanco, Tampache, Puntilla, Carranza, Ejido Estero de Milpas, Guásima, Tantálamos, Paso del Norte y Raya Oscura.



Las lluvias en el municipio, tanto en cabecera como en comunidades dejaron a decenas de familias afectadas, reporó el Ayuntamiento de Tamiahua en comunicado. Además, quedaron afectadas las carreteras que comunican con Tuxpan y Naranjos.

El Ayuntamiento de Tamiahua convocó al Consejo Municipal de Protección Civil para iniciar los trabajos de apoyo a la población. Se activaron un total de cinco refugios temporales en la cabecera municipal; entre ellos el auditorio local, la escuela secundaria de la comunidad de Milpas, la mutualista de la comunidad de Guásimas y los auditorios ejidales de las localidades afectadas

Mientras tanto, Protección Civil Municipal, Fuerza Civil, Policía Municipal, con apoyo voluntario de la ciudadanía comenzaron las labores para sacar el agua de los hogares, con motobombas, cubetas, abriendo zanjas y todo lo que tuvieran a la mano para auxiliar a los damnificados.



En los reportes preliminares se informó que hay más de 10 comunidades afectadas, que en los refugios instalados cuentan con toda la atención por parte del DIF Municipal y personal del Ayuntamiento.

Los trabajos de evacuación han iniciado con apoyo del Ejército Mexicano y la Secretaría de Marina, pero advierten fuentes oficiales del Gobierno local que hasta el momento sólo 30 familias se encuentran en refugios, 10 decidieron regresar a sus hogares, por tanto hay preocupación porque la población se niega a evacuar cuando se pronostican más lluvias y posibles desbordamientos en los esteros, lo que pone en riesgo a la población.