Felicita a padres que denunciaron a maestra abusadora y pide números para denunciar

En la ciudad de Córdoba, algunos padres de familia hemos seguido de cerca este caso y sabemos de la odisea que ha pasado la madre de este menor para que se haga justicia, y cuando tal parece que estaba por lograrlo, la maestra Irma Lahut Munguía, a quien efectivamente se le giró una orden de aprehensión por maltrato en el Juzgado Primero de Primera Instancia en el Distrito de Córdoba, la pseudoeducadora logró pagar una fianza sin tener que pasar un solo minuto en la cárcel.

Si bien es cierto que el juez de esa Instancia obsequió la orden de aprehensión en contra de esta señora, la tipificación del delito como “no grave” le sirvió a la señora para no ir al reclusorio.

El diputado local y ex secretario general de la Sección 32 del SNTE, Gustavo Moreno Ramos, dijo que “antes de que un caso trascienda a las autoridades judiciales, las autoridades educativas tienen muchas vías de solución en esos casos”.



Sin embargo los padres de familia de este menor, como muchos otros padres que han pasado por este “viacrucis”, no han encontrado la solución ante las autoridades educativas locales, pues en muchas, si no es que en todas las ocasiones que se han presentado estos problemas, la autoridades locales los han minimizado y jamás se castiga a los responsables ni con una simple y sencilla acta administrativa, por lo que aprovecho la oportunidad de solicitar el valioso apoyo al diputado Gustavo Moreno Ramos para que, de no existir inconveniente alguno, proporciones nombre y dirección de los encargados de las oficinas donde podemos denunciar este tipo de anomalías, ya que, repito, las autoridades locales educativas hacen caso omiso a estos problemas.

Por otro lado, es mi deseo felicitar a los valientes padres de familia que, a poco menos de un año, siguen luchando por lograr la justicia que merece su hijo; de igual manera me permito hacer una extensa invitación a todos los padres de familia para que pongan atención a los cambios de actitud de sus hijos y sobre todo cuando sus hijos se acerquen a ustedes, los escuchen, investiguen y de ser cierto, denuncien ante las autoridades correspondientes.



Mi Nombre es (…) y mi número telefónico es (…), datos que sugiero sean omitidos por privacidad. Gracias.