Geolocalización debe tener límites para no invadir privacidad de personas, señalan

Aunque la geolocalización es una de las herramientas tecnológicas más avanzadas en materia de telecomunicaciones, su uso se encuentra en una línea y frontera muy delgada de violación de los datos personales de los individuos, pues invade su privacidad y sus espacios.

De ahí que es de suma importancia que su utilización pueda ser regulada, de tal forma que sólo se dé dentro de lo que mandata la ley, consideró Javier Martínez, Comisionado del Instituto de Acceso a la Información del Estado de México (INFOEM).

El funcionario de transparencia recordó que, la geolocalización de una persona sólo se puede dar cuando un Juez así lo ordene, pero nunca de manera indiscriminada.

“Solamente se autoriza cuando haya la persecución de un delito o esté en riesgo la integridad de una persona, es decir, por cuestiones de seguridad pública”.



Sin embargo, cuando esta geolocalización se utiliza con fines de espionaje, de monitoreo de individuos, en el caso de redes sociales, muchas veces, las transnacionales no piden la autorización o la persona no sabe que está siendo vigilada, ahí entonces hay violación.

En entrevista, refirió que la geolocalización, que es parte de lo que en México se reguló en la Ley de Telecomunicaciones para la persecución de delitos, debe ser regulada de manera ponderada a través de la firma del Convenio 108 Plus, para saber hasta dónde se está dentro de los que mandata la Ley y dónde se está violando la privacidad de las personas.

Recordó que el Convenio 108 Plus, es un tratado de tipo internacional, en el cual se regula el flujo transfronterizo de datos personales.



“Es una tarea pendiente que tiene México porque eso se tendrá que determinar si se puede incorporar plenamente en el sector privado o para el sector público”.