Al señalar que la polémica que ha desatado la actuación de la diputada priista, Dalia Pérez, no es más que es una conjunción entre machismo, política, espectáculo, pero que está beneficiando la popularidad de la legisladora, el guionista, Fabricio Prada Rojas y actores del filme dijeron que “hay cosas más inmorales en el ámbito político que las que suceden en la película de Chiles Xalapeños”.
En conferencia de prensa, el guionista de la película comentó que el escándalo “es algo que suele suceder, el espectáculo y la política se basan sobre todo en escándalos y para estar en los medios a veces son necesarios, quien los está usando quizá sepa lo que está haciendo o quizá se le fue de la manos pero en lugar de perjudicar va a beneficiar a la carrera política de Dalia, está en todos los periódicos, en la prensa nacional y al final puede ser más tomada en cuenta porque va a ser más reconocida que en su campaña”.
Mientras que Raúl Santamaría, quien es el personaje del diputado Pedrero que hizo la escena con la teibolera, comentó que Chiles Xalapeños, proyecto independiente, es una ficción, “es una ficción plena, pero no es ficción la inmoralidad política que sufrimos a diario desde los altos niveles, todos sabemos cuáles son, desde el señor que tiene una serie de gasolineras y tiene un alto puesto y ni es mexicano”.
Hoy llama la atención el personaje de Dalia, pero la legisladora solo hizo su papel, actuó como cualquier otro personaje en donde la realidad personal es distinta a la que interpretaron cada uno de ellos, dijo el actor, quien destacó la labor su compañera de escena, como una diputada que está luchando por a favor de la no violencia contra las mujeres, de estar pendiente con las necesidades de los xalapeños.
Asimismo, Prada Rojas puso énfasis que el filme grabado en 2006 fue independiente, en donde el gobierno del estado no aportó económicamente nada y de éste solo recibieron el apoyo de permisos para que las locaciones se llevaran a cabo en espacios públicos como el Parque Juárez, el CEM, Los Berros, Caxa, entre otros.
Al recordar al personaje perredista, “El pancho Cachondo” y a María Rojo, quien actuó en La Tarea, dijo que estos actores políticos, por el hecho de haber participado en películas, se les denigró en sus acciones políticas y representativas, comentó que a pesar que muchos mexicanos están viendo la película, no está satisfecho ya que por falta de recursos la empresa productora redujo el 20% de las escenas, “estaría yo muy feliz que la misma gente estuviera viendo mi película si fuera la versión integral y no censurada”.
Explicó que hubo escenas que se quitaron y no se concluyó con el ciclo de algunos personajes, como fue la del secuestro de la esposa del diputado: la dejaban abandonada en el cerro Macuiltepec en la noche y la quitaron, igualmente hay una escena de Jorge Castillo, que actúa con Liliana Ayud, que era una pareja de caníbales que captaban a un joven que se había equivocado de casa y terminaban comiéndoselo.
Económicamente, dijo, afecta a los productores a la compañía MVFilms, que salieron solo a ventas en videoclubes y no la han comercializado en tiendas, entonces la piratería se la están comiendo económicamente, porque no la sacaron a pantallas grandes, pero es la industria quien obliga al pueblo a adquirir los materiales en menos costo.
Y al referir que la actuación de Dalia es suave, “no hace escenas fuertes, pero su papel es bien logrado”, el guionista dijo que le gustaría volver a trabajar con la diputada Dalia Pérez, incluso estaría abierto a contratar a más diputados siempre y cuando tengan una carrera de actuación.