Indígenas tzotziles dejan su lugar de origen porque hay mucha competencia y no pueden vender

Provenientes de San Cristóbal de las Casas, hablando poco español y comunicándose entre ellos en su lengua materna, el tzotzil, indígenas chiapanecos venden su mercancía a la gente que transita este domingo por la Plaza Lerdo.

"La situación está difícil, allá hay mucha competencia. Llevamos aquí tres meses, pero ya al menos sacamos un poco más para vivir", señala quien sólo dijo llamarse Jesús y es el único hombre que vende productos artesanales.

Se muestra renuente a hablar, aunque es el que más platica con la gente. Comenta que en Chiapas la vida es complicada, por lo que tienen que salir a otros estados para vender su mercancía.

Jesús y las mujeres que lo acompañan, son indígenas que cada año enfrentan el problema de la pobreza y se convierten en migrantes dentro de su propio país.
Algunos factores que repercuten en que cientos de indígenas dejen a sus familias y sus hogares son de carácter económico principalmente.

De acuerdo a cifras del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), los estados con mayor migración son Veracruz, Yucatán, Oaxaca y Chiapas, sobre todo que buscan mejores condiciones de vida.

Un claro ejemplo son Jesús y las mujeres tzotziles que venden sus chalinas de hilo en 100 pesos y blusas de vibrantes colores en 120 pesos a quienes se acercan a preguntarles.

Cuentan que al día venden aproximadamente 3 chalinas y de ahí sacan para rentar un cuarto por la colonia Revolución, así como para comer durante su estancia.

Añaden que esta semana es la última que estarán en la ciudad, ya que necesitan llevar dinero a su familia.

"El jueves nos regresamos, es tiempo también de ver a la familia. Llevar un poco más de dinero, para que podamos sacar el año".

Y ahí en la Plaza se hace presentes a la mirada de la gente que de vez en cuando se detiene a comprar las prendas que ofrecen, que tardan días en elaborar y que llevan tejidos sus sueños de un futuro mejor.