La justicia para Laura Jennifer, la solidaridad para su familia y un reclamo para la sociedad…

La noche de ayer (jueves 22 de Octubre), como comúnmente lo hago, me dispuse a revisar las últimas notas de lo que acontece en nuestro medio, en nuestra ciudad, y llamó fuertemente mi atención al leer el siguiente encabezado: “Encuentran muerta a una alumna de la Secundaria 105”… sin dudarlo me remití a leer la nota completa y al momento de conocer lo que lamentablemente ya es del dominio público, me quedé con sentimientos encontrados: consternada, enojada, confundida, triste, pensando en primer término en la desgracia horrenda que puede vivir una niña (por que era una niña) de tan sólo 13 años, edad en la cual tiene sus ilusiones y sueños de disfrutar una vida llena de felicidad rodeada de su familia, de sus amistades y de las metas que se trazan en el ámbito escolar para un día llegar a ser una persona preparada y útil para la sociedad. ¡No se vale!

En segundo término pensé en su familia, en su señora madre, en lo difícil que debió haber sido para ella esas horas de angustia al ver que Jennifer no regresaba a su casa, y el peor estaba por saberse: lo desgarrador para su corazón fue haberla encontrado en la forma que todos sabemos…

Ahora le corresponde a las autoridades investigar hasta el fondo este suceso terrible, y hacerle JUSTICIA a la pequeña, a su familia y a la sociedad xalapeña.

Ante estos hechos, que espero que las autoridades no lo manejen como un caso “aislado” por que lamentablemente vivimos en una sociedad producto de la descomposición de valores, deseamos y exigimos que ya no haya más Jennifers ni en nuestra hermosa y antes tranquila y segura Xalapa…ni en Veracruz ni en México.

Es necesario y urgente que reflexionemos y cada quien tome la responsabilidad y la conciencia desde el lugar en que nos encontremos: como padres tenemos toda la obligación y compromiso moral de hacer que nuestros hijos sean hombres de bien, que conozcan y ejerzan sin vacilar el respeto, y que tengan el más alto valor por lo que es la vida propia y la de otro ser, que nos involucremos en lo que hacen, en lo que piensan y sienten y en conocer quienes son sus amigos, los hijos para orgullo de algunos y desgracia de la mayoría son el reflejo de los padres, así que debemos pensar en que clase de hombres y mujeres estamos forjando…ya no podemos decir qué clase de mundo les vamos a dejar a nuestros hijos, si no que clase de hijos le vamos a dejar a este mundo, recordemos que los hijos son el producto del amor y que eso es lo que tiene que reflejarse cuando los formamos, ellos no son bancos en donde se depositan, por culpas, o falta de tiempo y atención, los mejores regalos, lo último en la alta tecnología, o la frustraciones y deseos de algo que los padres no pudieron ser, ellos son SERES HUMANOS…Esto deberían tenerlo bien claro aquellos padres cuyos hijos son DELINCUENTES, ASESINOS, VIOLADORES, LADRONES, aquellos padres de esos que atentaron contra la inocencia y la vida de Laura Jennifer, esos “PADRES” a quienes las autoridades deberían también, con todo el peso de la ley, hacer pagar lo que por su dejadez, descuido, desamor y desobligación también los hace cómplices de sus hijos, ellos de alguna manera también son asesinos de Laura Jennifer.

A los compañeros maestros de todas las escuelas y todos los niveles: hay que estar más atentos de nuestros alumnos, involucrarnos más en sus vidas, tenemos esa responsabilidad, saber cómo viven, con quiénes viven, en dónde, cual es su sentir, su pensar, si tienen problemas, si tienen qué comer…TODO nos debe interesar, nuestros alumnos no son estadísticas…eso no nos importa! Esas son cifras vacías el saber si era la número 10 o 15 en lista… ¡son seres humanos!

Lo que podamos aportar con nuestros niños, brindándoles no sólo el conocimiento en aspectos académicos si no en poder prepararlos para la vida, mucho ha de servir y ha de ayudar a cumplir una parte de nuestro objetivo como educadores y agentes de cambio social.

A las autoridades que tienen la responsabilidad de resolver este caso solicitamos lo hagan de manera eficaz, objetiva y respetuosa.

Usted amable lector ¿qué haría si le hubiera sucedido esto a su hij@? Piense, reflexione y actúe con responsabilidad.

Espero que esta reflexión, pequeña sirva para sembrar un poco en nosotros la inquietud para pensar si como padres, maestros, autoridades estamos haciendo lo correcto con nuestros niñ@s.

Mi clamor de JUSTICIA para JENNIFER
Mi solidaridad con la familia de la pequeña Jennifer
Mi reclamo para una sociedad que tiene que trabajar en el rescate de Valores

Lic. en Pedagogía Alejandra Hernández López
Profesora de Educación Especial
Comisionada en la Sría. de Equidad, Género y Derechos Humanos
Sección 32 del SNTE.
Correo: [email protected]