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Sección: Estado de Veracruz

La reforma laboral, producto de la “esquizofrenia” política: Investigador

- Sólo legalizará las condiciones de trabajo precario en detrimento del trabajador, señaló Otto Fernández

- No se sabe a quién beneficiará, aunque diputados y senadores “coincidan” en aprobarla

?ngeles Godoy Morales Xalapa, Ver. 23/10/2012

alcalorpolitico.com

“La Reforma Laboral es un caso paradigmático donde no se sabe bien quiénes se benefician y quiénes se perjudican. Lo mismo dicen que va a generar empleo, pero el Fondo Monetario y el Banco Mundial dicen que no”, señaló Otto Fernández Reyes, sociólogo y catedrático de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), campus Iztapalapa.

Durante la inauguración de la 5a. Semana de la Sociología, impartió la conferencia “Movimientos sociales contemporáneos”, en el Salón Azul de la Unidad de Humanidades, dijo que la Reforma Política es un tema muy debatido, sobre todo en aspectos como los que se viven actualmente en México.

En entrevista, Fernández dijo que cabe la reflexión sobre el por qué se introduce un componente que no generará capital, sino que legalizará las condiciones de trabajo precario.

“Voy a ser alguien que tiene un trabajo bajo legalizado, es un tema que por dónde se analice tiene mucha relevancia social y política”.

Destacó que tanto la Cámara de Diputados como la de Senadores coinciden en aprobarla, por lo que en ese punto no hay diferencias.

“Es un regalo a la inconsciencia y a la ausencia de maduración ideológica de los grupos empresariales que quieren mantener sus recurso, prerrogativas. Los matices no existen a lo que puede ser el contenido. A lo que entramos es a una especie de esquizofrenia política, cuál es la ganancia. Siempre en una iniciativa uno hace esa pregunta”.

Respecto al movimiento “#Yosoy132” señaló que no es lo mismo reprimir a una Universidad pública que a una privada. Este movimiento, que surgió como liberal y progresista, pedía democracia, así como participación y representación en la toma de decisiones.

Añadió que a su parecer, el Movimiento pasa por un periodo de reorganización, así como de construcción de relación social entre actores que nunca se había vinculado.

“Estudiantes privados y estudiantes públicos, es muy difícil, tiene un enemigo interno que no los vincula y muchos enemigos externos que no quieren esa relación, tienen que ponerse de acuerdo por consenso en las estrategias de acción. Es una lección de política que no tienen los partidos políticos. Y no romper con los que son minoría. El “#132” puede desaparecer, pero las energías de protesta viven en el subconsciente de la sociedad y esas las retomarán otros”.

Finalmente explicó que los grupos políticos actúan de acuerdo a sus intereses, por ello casi siempre apoyan lo que les convenga más. Y, aunque hay demandas que no culminan con movimientos sociales, no significa que no las haya. Algunos van en representación de interés corporativos y cuando no les hacen caso posiblemente se transformen en un movimiento social.