La UV no se rinde ante el poder ni ante las adversidades; no se agacha: Rectora

La rectora de la Universidad Veracruzana, Sara Ladrón de Guevara González, definió que la comunidad universitaria ha demostrado que no se rinde ante el poder ni ante las adversidades, no se agacha ante el poder que se quiere imponer injustamente, ello ante el reclamo que ha sostenido a nombre de la institución para que el Gobierno del Estado pague sus adeudos con la institución.

“Juntos cada uno de nosotros en su espacio, con sus responsabilidades, capacidades y sus legítimos ambiciones, constituimos una comunidad que ha demostrado que no se rinde ante las adversidades, que no se agacha ante el poder que se quiere imponer injustamente, que sabe mantenerse firme y señalar con franqueza lo que está mal”, manifestó en sesión solemne durante su Tercer Informe de Labores.

En la sala de conciertos Tlaqná, acompañada por autoridades educativas, gubernamentales, legisladores estatales, federales, exrectores, el gobernador electo Miguel Yunes y ante la ausencia del actual mandatario Javier Duarte o algunarepresentación de éste, Ladrón de Guevara aseveró que han salido airosos de la prueba, pero sin caer en la tentación de la política torpe y por lo tanto autodestructuctiva.

Como autoridades, sostuvo, esto les hace sentir satisfacción pero no complacencia ni conformidad. Afirmó que se sienten satisfechos como "el campesino ve que la milpa aguantó las inclemencias del tiempo", como el académico que estableció el hilo conductor de su investigación, como el estudiante que ha sabido organizar su trabajo y va ganando confianza, pero resta dar frutos.

La rectora exhortó para seguir trabajando para terminar con ahínco lo que empezaron y añadió que es verdad que el éxito ha llamado a la Casa de Estudios una vez que han sido capaces de denunciar.

“Si el éxito ha acompañado mi desempeño como rectora de esta casa de estudios es porque el éxito es de la comunidad entera y con humildad, pero con franqueza les digo que creo que haber tenido la capacidad para mi desempeño y desprenderme del éxito, siempre efímero y relativo… me he quedado y me seguiré quedando en el mandato de la comunidad universitaria”, expresó.

Refirió que pasó de ser una anécdota —la primera mujer en la encomienda de la Rectoría de la UV— a un hito —la primera en decir lo que todos estaban viendo—. Sin embargo, dijo, esto no se ha tratado de una exhibición de músculo, de poder, de capacidad de movilizar violentamente a los miles de integrantes de la institución, se ha tratado de una exhibición de la inteligencia universitaria, del poder de las razones y la confianza en la justicia y la legitimidad.

“Se trata en definitiva de una exhibición de humanidad que nos ha deslindado ante la opinión pública de la corrupción de las autoridades gubernamentales”, dijo.

Cierto es, destacó, que las circunstancias han cambiado y ahora a la Universidad Veracruzana se le invitó a articular el Plan Veracruzano de Desarrollo, pero el compromiso de saldar la deuda es firme.

“La Universidad Veracruzana no es una moneda de cambio ni para mí ni para nadie para saltar a la política”, expresó, lo que desató una ola de aplausos.

Sara Ladrón de Guevara aseguró que no hay un acercamiento interesado al poder y sostuvo que la Universidad Veracruzana no se vende, pues de su dolor han aprendido hasta el punto que han sido capaces de hacerlo trascender.

Afirmó que la institución ha escogido la senda más coherente para superarla y dijo que para muchos el silencio sumiso, esperanzado en que mejores momentos habrían de llegar, hubiera sido la mejor opción, para otros la salida habría sido la violencia, pero la UV ha sabido concentrar su energía en lo más importante, no en lo más urgente, fortalecerse y reivindicar sus sacrificios como un proceso obligado, pero sanador que reafirma su vocación de grandeza colectiva.

La Rectora aseveró que no miran a la Casa de Estudio como curiosidad o con la simpatía de quien advierte un David frente a un Goliat o con la frialdad de quien cree descubrir un nuevo héroe efímero, no, ven a la institución como un ejemplo a seguir en educación pública, “estos son los frutos, no meras promesas”.