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Sección: Estado de Veracruz

La UV ya no admite porrismo, componendas ni el viejo verticalismo: Arias Lovillo

- Se opone a los retrocesos y regresiones y advierte: “no nos obliguen a luchar de nuevo contra el individualismo y la intolerancia”

- Va "contra el uso político de la institución para fines personales y la distorsión de sus propios fines"

- El extraño mensaje lo envió en la fase final del Congreso Universitario de la UV que involucró sus 5 campi

?ngeles Gonz?lez Ceballos Xalapa, Ver. 17/04/2013

alcalorpolitico.com

Al continuar el Congreso Universitario de la Universidad Veracruzana, el rector Raúl Arias Lovillo, afirmó que la Casa de Estudios no admite más impulsos por la violencia, porrismo, componendas y el viejo verticalismo, impropios de los vientos que soplan en nuestro país y en Veracruz desde hace varios años, lo cual causa desazón entre los universitarios quienes crean que pueden volver esos tiempos.

Sostuvo que la Universidad Veracruzana es una entidad superior en donde todo lo que se ha hecho hasta hoy, se ha hecho con dificultades, nada les ha sido dado de manera gratuita como a todos les consta.

“Todos estos años, académicos y estudiantes hemos trabajado con ahínco, con dedicación, con amor a la Universidad, terminado por la fuerza de la razón, los viejos impulsos por la violencia y el porrismo, la componenda y el viejo verticalismo, impropios de los vientos que soplan en nuestro país y en Veracruz desde hace varios años, por ello, causa desazón entre los universitarios de que haya quienes crean que pueden volver esos tiempos”, señaló.

Otra vez habrá que decir que la historia será primera como tragedia y segunda como farsa, añadió y dijo que estarán de acuerdo con él en que la UV no admite retrocesos ni regresiones al pasado.



“Retrocesos y regresiones que nos obliguen a luchar de nuevo contra el individualismo y la intolerancia, contra el uso político de la institución para fines personales, la distorsión de los fines propios de la institución, la crispación interna, la simulación académica, todo lo cual la comunidad rechaza y ha rechazado y considera resabios del pasado", aseguró.

Asumió que las tareas universitarias están sujetas a tensiones, las que provocan coincidencias y discrepancias, convergencias y divergencias, pero que han sido superadas cuando ha sido menester hacerlo, que han hecho del pluralismo y la diversidad un fundamento de las relaciones entre todos los universitarios.

Afirmó que nada de eso es casual, la UV ha hecho de sus aulas, de sus campi, los espacios donde los estudiantes aprenden a hablar con civilidad, donde escuchan con respeto, aprenden la diferencia entre un argumento y una opinión, “todo ello es lo que nos da fortaleza para enfrentar con optimismo el futuro”.



Ante estudiantes y académicos, en la USBI manifestó que no hay una sola diferencia que no pueda ser superada o una sola idea que no pueda ser expuesta y discutida por el pensamiento libre y autónomo de todos los universitarios.

Agradeció a los académicos y estudiantes organizadores del Congreso y dijo que este evento en esta capital es de enorme significación en la vida de la Casa de Estudios y reiteró que lo hecho en los otros campi ha sido un ejercicio de libertad y democracia, un ejercicio que enriquece en lo personal y en lo académico, pero que los une como comunidad.

Sumamos nuestra fuerza para la renovación y el mejoramiento de nuestra institución dijo en su discurso, al tiempo de definir que el Congreso Universitario busca ratificar que la UV debe seguir siendo un espacio para aprender unidos, para convivir respetando las coincidencias y discrepancias y sobre todo, para ratificar el compromiso de trabajar unidos por la preservación y consolidación del proyecto académico.

“Hemos venido demostrando los veracruzanos que somos una comunidad políticamente madura, que vive con emoción y razón crítica el debate de las ideas, alentada por la convicción de que nuestro proyecto académico está firmemente arraigado en esta sociedad”, manifestó.



Reiteró que la asistencia a este Congreso es sin prejuicios ni decisiones predeterminadas, donde nada ni nadie debe inhibir lo que piensan, pero respetándose unos a otros, fue entonces que pidió hablar con la verdad, sin engañar a nadie, sin engañarse a sí mismos.

“La sociedad nos observa como lo dijo el Secretario Académico y siempre espera que actuemos con responsabilidad, inteligencia y ética”, refirió.

Enfatizó que la Casa de Estudios ha recorrido un largo camino de aprendizaje que no es de ayer, pero que cuenta con experiencia acumulada para darse a la tarea de enfrentar la “urgente” academización de la Universidad, además, se abrió “como nunca antes” las puertas a la transparencia y la rendición de cuentas, “sin dejar de reconocer aciertos, se ventilaron los errores de las administraciones pasadas para demostrar que no éramos ni cómplices ni indiferentes”.



Arias Lovillo recordó que en los Foros Universitarios, celebrados por primera vez hace casi cinco años, se demostró que la comunidad estaba lo suficientemente preparada y apta para establecer nuevos espacios para la discusión de los problemas universitarios y ahí, se fortaleció la convicción democrática de la Casa de Estudios.

En aquel momento, se reafirmó que estudiantes y académicos debían ser actores de la transformación de la Universidad y no simples espectadores. Además, fortalecieron su capacidad para escuchar, dialogar y para ejercer la autocrítica, aseguró.

En ese mismo proceso, aprendieron que una universidad no es una suma de escuelas o facultades, ni una estructura educativa para educar, aprendieron que lo que le da el verdadero sentido a la Universidad, es su capacidad de emprender tareas innovadoras del conocimiento y el cumplimiento del fin superior que la sociedad le ha encomendado: preparar a los estudiantes para vivir aquellos momentos de su vida en la cual encuentren diferentes maneras de aliviar el sufrimiento humano.



“Ese es el humanismo de nuestras convicciones pedagógicas, nuestro modelo educativo junto a todos aquellos aspectos que tienen que ver con la necesidad de crear, recrear y reproducir conocimientos y con la pertinencia y calidad de nuestros programas, han tenido ese indiscutible rasgo humanístico”, aseveró.

Raúl Arias Lovillo indicó pues, que el punto de llegada de todo ese proceso es el Congreso Universitario que es de todos los universitarios, pero que también es producto de una coyuntura política especial en la que se expresaron y unieron las sensibilidades de estudiantes y académicos del área de Humanidades.

“Hoy en Xalapa, quiero reiterar que en este Congreso no debemos desaprovechar la oportunidad de analizar y discutir nuestros puntos de vista, de expresarnos con entera libertad y sin prejuicios, para eso estamos aquí, para sincerarnos, no sólo para oírnos a nosotros mismos, sino para abrir nuestra mente a la idea de los demás. No actuemos como autistas de la política universitaria. Ya lo dije antes, no hay límite que el respeto a las ideas y a las propuestas de los demás. Estoy convencido que no hay una sola diferencia que no pueda ser superada, no hay una sola idea que no pueda ser expuesta y discutida por el pensamiento libre y autónomo de todos los universitarios”, manifestó.



Entiendo como Savater (Fernando), que podemos ser racionales y que lo difícil es ser razonables, refirió el Rector y por ello pidió no renunciar nunca a ser ambas cosas: racionales y razonables, capaces de discernir lo bueno de lo malo, lo mejor de lo peor, la mentira de la verdad.