Las bondades de la música permiten que sea utilizada hasta para mensajes políticos

“La música sigue siendo primordial en nuestras vidas, la damos por sentado pero tiene una fuerza especial. Todos los mensajes tanto políticos como comerciales e ideológicos, llevan música”, señaló Rafael Figueroa Hernández, del Centro de Estudios de la Cultura y la Comunicación de la Universidad Veracruzana.

Explicó que hay música que sirve a cada propósito, de ahí que muchas veces sea utilizada en algunas ocasiones como himnos o emblemas.

Respecto a la música de la cultura tradicional, afirmó que sigue estando presente y es a través de ganar espacios en las nuevas generaciones, como se ha podido perpetuar.

En este sentido, mencionó que el Son jarocho es un claro ejemplo de cómo ha sobrevivido con base en un movimiento ciudadano que realiza alianzas con instancias gubernamentales.

“Ya ha tenido algunos momentos interesantes como cuando los Cojolites, fue el primer grupo del género de Son jarocho en ser nominado a los Grammys. Se han logrado varias cosas, desgraciadamente no todas las músicas tradicionales están en el mismo plan”.

Dijo que pese a los esfuerzos, hay algunas que se han ido perdiendo, tanto por la indiferencia de los grupos; así como el escaso interés por tocarlas.

Hay casos aislados de personas que buscan perpetuar la música tradicional; sin embargo, sus esfuerzos no son suficientes, ya que muchas veces hay canciones que se pierden porque nadie las toca.

En ese sentido, habló sobre la música política que genera la reflexión en la conciencia social.

“La música genera identidad, todos los grupos sociales retoman, crean o recrean tipos de música que los identifica. A través de la música nos sentimos parte de algún grupo, de edad, étnico, regional, todos en algún momento compartimos música que nos hace pertenecer a un grupo, por eso es importante”.

Finalmente, señaló queesto habla de que la música es referencia que puede utilizarse para hablar sobre una posición social en contra de un grupo, para expresar el sentir de la gente; así como para enaltecer algunos hechos o aquellos que son escritos ex profeso para una causa. De ahí la importancia de que se perpetúe y se dé a conocer a través de las generaciones.