Maestros de la CNTE condenan “campaña de desprestigio” de su profesión

Señor Director de Al calor político:

Mucho agradeceríamos la gentileza de ver publicada en su espacio informativo la siguiente carta donde, ciudadanos, trabajadores y miembros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación Veracruz (CENTE) expresamos nuestra opinión acerca de los últimos acontecimientos relativos a la imposición de la reforma educativa.

“La educación no es sólo para reformar estudiantes o entretenerlos o hacerles unos técnicos expertos, es para inquietar sus mentes, abrir sus horizontes, encender sus intelectos, enseñarles a pensar correctamente, si es posible”. Robert M. Hutchins



Ante los barruntos de mano dura alentada por sectores empresariales y parte de la burocracia política en contra de las manifestaciones de los trabajadores de la educación aglutinados en la CNTE en los estados de Guerrero, Oaxaca, Michoacán Hidalgo, el Distrito Federal, Morelos, Puebla, Tlaxcala, Veracruz, Zacatecas, Durango, Jalisco, Sonora, Chihuahua y Baja California, hacemos un llamado a las autoridades locales y federales a restablecer el diálogo que atienda la demanda de abrogación de la reforma a los artículos 3, 73 y transitorios.

Condenamos, asimismo, cualquier acción represiva que se ejerza en contra de los trabajadores de la educación: no queremos otro Atenco.

Es indudable que las reformas que atacan y vulneran los derechos de los trabajadores en general son dictadas por poderes externos (Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional, Organización para la Cooperación y el desarrollo, la Unión Europea, el Tesoro de EUA), quienes exigen a Enrique Peña, a Emilio Chuayffet y a Osorio Chong, que las implementen y criminalicen la lucha social.



Con la política salinista de “ni los veo ni los oigo”, la clase gobernante asume una actitud arrogante e insensible que sólo puede conducir al caos y al dolor. Les exigimos actúen con pleno respeto a los derechos humanos al ejercer sus funciones: que NO se imponga la razón del dinero y de la fuerza.

No ignoramos que la educación pública es una tragedia, pero ésta ha sido inducida por los mismos gobernantes para justificar su privatización; ya que son ellos quienes han impuesto la currícula escolar, ellos modificaron planes y programas de las instituciones formadoras de maestros, ellos contratan y seleccionan a los docentes, ellos imponen en común acuerdo con el sindicalismo corporativo a quienes vigilarán se cumplan sus órdenes y mantengan bajo control a padres de familia, alumnos y maestros: el actual modelo educativo es una importación que no tomó en cuenta la opinión de sus principales actores: padres de familia y maestros.

Por eso condenamos la infame campaña de desprestigio y la injusta criminalización que hace el Estado de esta noble profesión a través de los medios masivos de comunicación. No nos oponemos a ser evaluados, pero tiene que ser una evaluación transparente que busque realmente mejorar el servicio educativo, sin amenazas ni exclusiones ni dobles intenciones. Mientras las estructuras sean las mismas y los funcionarios encargados de ellas sean elegidos por compadrazgos y pagos de favores a pesar de su supina ignorancia y falta de ética, ninguna evaluación será creíble ni mejorará nada.



Si algo se ha salvado del aspecto humanista de la educación ha sido gracias a la abnegación de miles de maestros, quienes calladamente y con amor atienden a millones de niños de nuestra patria. Que hay elementos nefastos, cierto, pero muchos de ellos son agentes y orejas del mismo gobierno para impedir la organización solidaria entre los trabajadores. A estos elementos los ubican en las estructuras de gestión y administración de las instituciones (escuelas, secretarías y sindicato) para que realicen funciones de esquirolaje, de “informantes” y cuando sea necesario funcionar como operadores de fraudes electorales, llegado el caso.

De tal modo que la reforma educativa es un fracaso, no por las corrientes pedagógicas o teorías educativas que la sustentan, sino por el enfoque y el modo “distorsionado” con que se ha implementado, al incorporar solamente la visión empresarial y dejar intocables aspectos absolutamente dañinos para su buen funcionamiento (intereses caciquiles, el charrismo sindical y la profundamente corrompida burocracia política)

Una buena educación debe formar ciudadanos más plenos y más felices; debe aspirar a crear una sociedad con menos pobres, menor incidencia de crímenes, con más cultura y menos injusticias. Ante el diagnóstico sobre la nuestra es obvio que la educación pública que se impone desde hace 20 años NO ha funcionado, porque nuestro país es un ejemplo mundial de impunidad, de injusticia, de insatisfacción social, de analfabetismo, de crimen, de saqueo y depredación.



El egoísmo, la simulación, la indolencia, el racismo, la exclusión, la avaricia, la competencia desleal, la maña, la trampa, la ilegalidad, la ignorancia y el deseo por la acumulación sin medida ni respeto por los demás y medio ambiente, son los “valores” que se busca sembrar en el corazón de las nuevas generaciones con el enfoque educativo POR COMPETENCIAS. Esto lo sabemos los trabajadores en lucha y por eso defendemos el sentido (humanista) original del artículo 3 constitucional: los alumnos no son objetos ni mercancías de los que se debe obtener la mayor rentabilidad posible.

La población, anestesiada por el bombardeo masivo de publicidad y propaganda gubernamentales, poco entiende que la grave crisis por la que atraviesa la educación en México; no se resolverá poniendo exámenes a los maestros y alumnos, pero cuando empiecen los despidos masivos, las huelgas y sus hijos sean excluidos y el país se desestabilice más, entonces comprenderán que el verdaderamente responsable de la debacle educativa es el sistema de mercado impuesto desde 1984. Lo que sí han logrado eficientemente es acrecentarlos. privilegios insultantes de los grupos político-empresariales que detentan el poder.

Por último, invitamos a los docentes, padres de familia y ciudadanos que les interese conocer las afectaciones de esta reforma y las propuestas educativas de los maestros a que asistan al Foro de educación alternativa que se realizará el próximo 21 de abril en la Plaza Lerdo a partir de las 10 horas.



¡Reprobamos la posición represiva de los gobiernos Federal y Estatales hacia la CNTE en específico a la CETEG en Guerrero!

¡Reprobamos el arribo de la Policía Federal a Oaxaca!



¡Reprobamos la campaña de denigración del magisterio orquestada por Mexicanos Primero!

¡Exigimos la libertad inmediata del compañero profesor José Manuel Zúñiga Guerrero, ex presidente municipal de Ixmiquilpan, Hidalgo, luchador social en defensa de la Educación Pública!

Jorge Salazar García, Sandra Romero Agustín, Francisco Antonio García Saint Charles, Israel López Reyes, Silvia Cruz Celestino, Víctor Moreno Bolaños, Omar Efrén Martínez Sánchez, Miriam Rivera Zapata, Miguel Mayo Martínez, Luis Alfredo Jiménez Martínez, Lorena García Solano, Olivia Sánchez Moreno, Ariadna Aguilar Alarcón, Flavio Mendoza Fragoso, Minerva Galán Quinta, Jorge López Morales, Pedro Contreras, Maximino Antonio Jiménez, Francisco Hernández Santiago, José Francisco Hernández Herrera, Pedro Morales Morales, Guido Morales Mora, Leonor Gutiérrez De Gaona, Lucía Vasconcelos Cortés, Jesús Gutiérrez Hernández, Jorge Cruz Ibáñez, David Teofi Morales, Beatriz Adriana Cruz Mancilla, Facundo Jiménez Ramírez, José de Jesús Sánchez Ramos, Trinidad García Solano, Angélica María Huesca Palomino, Guadalupe Castillo, Rafael Cortina, Celi Medina Melchor, Cristina Ortiz, Isaura Estañol, Eligio Ramírez, Ana María Galicia, Arturo Garza, Gilberto González Colorado, Juan Manuel González, Alejandro González, José Antonio Cruzado Cuevas.



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