Inconformes con la reforma al Poder Judicial advierten que interpondrán un recurso de amparo e incluso acudirán a instancias internacionales para impedir la iniciativa de elegir a jueces mediante voto popular.
El magistrado del Segundo Tribunal Colegiado en materia Civil en Xalapa, José Manuel De Alba De Alba, quien encabezó la marcha de inconformes en la capital del estado, expresó que es necesario llevar a cabo una reforma judicial, pero no cesar a los jueces y magistrados sin ser escuchados.
“No nos han dado la oportunidad de defendernos, solamente es la voz de palacio la que dice todas estas infamias. Este es un régimen estilo Hitler que está llevando a México a una dictadura, donde él habla y dice su verdad; con esa verdad dice: cesen a todos los magistrados y jueces para cambiarlos por los que elijan por voto popular”, expuso.
Esto, dijo, atenta contra la garantía que tienen todos los mexicanos de defenderse; por tanto, se trata de una reforma ilegal. Al respecto, asentó que continuarán en lucha hasta las últimas consecuencias por la vía cívica, legal, constitucional y convencional. En este sentido, refirió que la sobrerepresentación de Morena para el Congreso de la Unión ya pasó en el Instituto Nacional Electoral (INE), pero se espera que en el Tribunal Electoral se logre frenar.
“Las mayorías no se imponen, no es democracia tener una mayoría apabullante. El diseño de nuestra democracia es para dialogar; una democracia que no dialoga, que impone, entonces no estamos hablando de lo mismo”, dijo.
El magistrado señaló que, de entrada, realizan las manifestaciones antes de iniciar el proceso legal, ya que interpondrán un recurso en materia de amparo, una acción de inconstitucionalidad que le podría corresponder a la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH). “Imagínense lo que es la sobrerepresentación: bloquear todas las acciones de inconstitucionalidad, bloquear todo eso. Es una gran problemática. Y cualquier ley que se le ocurra y que diga que está apoyada por el pueblo nos va a llevar”, asentó.
Dejó en claro que las mayorías no pueden respaldar ninguna cuestión que viole los derechos humanos. “El Poder Legislativo y el Poder Ejecutivo, en una reforma constitucional, sin darnos garantía de audiencia, cesan a uno de los poderes de la unión. Esto es un golpe de Estado”, finalizó.