Un nuevo caso de abuso a la autoridad por parte de la Policía Estatal tuvo lugar este martes en Coatzacoalcos, donde los uniformados golpearon y detuvieron a un joven repartidor por no dejar que le revisaran el celular.
El agraviado, Jorge Sosme José, quien tuvo que pagar 2 mil 200 pesos para salir de la cárcel preventiva al ser acusado de "ultrajes a la autoridad", narró que este martes iba a realizar una entrega en motocicleta, cuando los policías lo detuvieron para una revisión de rutina.
Sin embargo, los policías habrían comenzado a abusar de sus funciones y más allá de la revisión de papeles del vehículo del joven, quisieron revisar su teléfono personal por lo que el ambiente se tornó violento.
Debido a que el agraviado estaba cerca de su domicilio, su familia, entre ellos, su mamá, llegó al punto para defenderlo y evitar que se lo llevaran detenido sin motivo alguno y también fue golpeada y maneada.
El motociclista, acompañado de compañeros que cooperaron para sacarlo de la cárcel, denunció por la noche estos abusos policiacos de los que siempre son víctimas y pidió a las autoridades hacer lo propio para parar las acciones de los uniformados.
Insistieron que los Policías usurpan funciones pues piden documentación que únicamente debería pedir Tránsito.
Retenes para agraviar a la población
Estos señalamientos no son los primeros en contra de Policías Estatales, a principios de enero migrantes y habitantes de Coatzacoalcos los señalaron de amenazarlos y extorsionarlos.
Por su parte, automovilistas denunciaron que en los retenes que ponen en la madrugada aprovechan la oscuridad para quitarles teléfonos celulares y dinero a cambio de no detenerlos por el famoso delito de "ultrajes a la autoridad".