Movilizaciones estudiantiles son reflejo de la situación que viven los jóvenes

“Hay una emergencia social de parte de los jóvenes, hay un conflicto cultural, una ruptura de generaciones muy significativa. Hay un rechazo de los estudiantes a los modos y formas autoritarias de tratarlos. Esta reacción de los estudiantes de universidades privadas y públicas ha traído un movimiento juvenil más amplio”, declaró Miguel Casillas, director del Área Académica de Humanidades de la Universidad Veracruzana.

Entrevistado en el marco del Seminario: “La gestión de la violencia en las escuelas de educación básica, más allá del Bullying”, organizado por el Instituto de Investigaciones Histórico-Sociales de la UV, el Director habló sobre las recientes movilizaciones de estudiantes que se suscitaron a raíz del llamado “viernes negro de Peña Nieto en la Ibero”.

Negó que haya apatía a la participación política por parte de los estudiantes de las escuelas privadas ya que incluso los estudiantes de la Universidad Iberoamericana participaron en el movimiento estudiantil del 68, así como en lo de Atenco.

“En efecto, sociológicamente podríamos decir que hay un liderazgo social de determinados actores; entonces las élites sociales no lo son para convocar a la sociedad de consumo. Son élites que también atraen a la sociedad que adopta una postura política. En este caso claro que los chicos de la Ibero tuvieron mucha imaginación para responder con su pequeño video mostrando sus credenciales diciendo -no somos porros, no somos acarreados-”.

Advirtió que esto puede ir creciendo ya que se trata de una generación que no está siendo incorporada a las propuestas políticas.

“Hay un grupo social que no está incluido en las propuestas políticas, no está siendo consultado, que además se da cuenta de los procesos de manipulación de la información. Entonces es incrédulo ante ello y genera sus propios espacios y mecanismos de discusión o debate”.

Destacó que por ello los estudiantes se sienten identificados y trata de conformar una sociedad participativa, democrática. Incluso desde la universidad se avocan en generar actores sociales comprometidos con su destino.

“Que los estudiantes hagan esto no es sólo normal, sino muy bien que hagan esto, que se expresen. Que tengan intervención en las elecciones y en la vida democrática me parece indispensable”.

Casillas recordó que son estudiantes de varias universidades en todo el país quienes han reclamado su legitimidad superando los medios; así como los canales de comunicación oficiales y controlados.

Ellos se han convocado y desarrollado a través de las redes sociales donde han llamado la atención mundial. Ahí es donde se ve otro tipo de expresión, la acción real de los jóvenes que han sido solidarios para formar un frente común.

“Se combina con otros movimientos por ejemplo los que han convocado a favor de López Obrador, la reunión de muchos estudiantes el domingo pasado. El hecho más relevante, además de esa rebelión estudiantil, creo que es el modo en cómo se comunica”.

Sobre el comedor autónomo, el Director refirió que el propósito de la UV no es subsidiar los comedores, ni las cafeterías, ni nada por el estilo ya que cuenta con recursos para ello, ni está dentro de sus funciones.

De ahí que tendrán un periodo de prueba de seis meses con el propósito de sentar claramente cuestiones de higiene, reglas de operación, nutrición. Posteriormente se someterá a una evaluación para corregir las deficiencias que pudieran existir; así como ver que se cumplan las metas fijadas.

Mencionó que el éxito de estos comedores depende de cada comunidad ya que hay algunos similares como en la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México que llevan varios años. El compromiso de los estudiantes es fundamental para que tenga un buen desarrollo.