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Sección: Estado de Veracruz

Niños de municipios serranos bajan a Orizaba a bailar con máscaras de viejitos

- Algunos están solos, mientras sus padres venden artículos en otra parte de la ciudad

- Autoridades les han pedido que no expongan a los menores ante las bajas temperaturas

Lissette Hernández Orizaba, Ver. 26/12/2020

alcalorpolitico.com


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La pandemia ha obligado a que muchas prácticas ahora sean diferentes, sin embargo, lo que no cambia es la tradición de los niños bailando en la vía pública con una máscara de viejitos para despedir el año.

La mayoría de estos menores de edad que se ubican en la calle Francisco I. Madero de la ciudad de Orizaba, son provenientes de municipios serranos y rurales, como Soledad Atzompa, Ixhuatlancillo, La Perla, Mariano Escobedo, entre otras localidades.

Algunos de ellos bailan en esta transitada calle en presencia de sus padres, mientras estos platican entre sí con los papás de otros menores que también realizan esta actividad.



Sin embargo, quizá los menos, lo hacen en la calle solos, en tanto sus padres o al menos su mamá, anda vendiendo diferentes artículos en otra parte de la ciudad.

Las edades de los pequeños son diferentes, pero este año se pudo observar a una menor la cual apenas y podía caminar, es decir que estaba aprendiendo a dar sus primeros pasos, aunque también bailaba para conseguir junto con otros dos infantes monedas que puedan ayudar a la economía de sus familias.

Vestidos con sus atuendos indígenas, portando la máscara de viejito, simulando al año que termina y cantando la tradicional melodía que a la letra dice: "una limosna para este pobre viejo, que ha dejado hijos para el año nuevo", los menores de edad bailan y piden a la gente que deposite en un sombrero o en una pequeña cubetita cierto recurso económico.



En reiteradas ocasiones autoridades municipales les han invitado a los papás a que regresen a sus lugares de origen y no expongan a los menores de edad, pues algunos de ellos andan solos en las calles, otros podrían enfermar por las bajas temperaturas que se han registrado en los últimos días en Orizaba, pues su ropa es delgada.

Lo cierto es que la realidad de la pandemia no ha detenido la necesidad económica que las familias de estos niños tienen, así como tampoco podría detener algún contagio de COVID-19 para ellos, pues no portan ninguna medida de protección.