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Sección: Estado de Veracruz

Pandemia puso en crisis la salud, educación y seguridad de los mexicanos: Obispos

- Recuperación se vuelve más compleja al encontrarnos en un período electoral

- Invitan a quienes aspiran a gobernar a promover acuerdos para superar dicha crisis

Lissette Hernández Orizaba, Ver. 15/04/2021

alcalorpolitico.com

Las graves situaciones provocadas por la pandemia han puesto en crisis nuestro sistema nacional de salud, educativo, la seguridad de los mexicanos y la sana convivencia familiar que ha visto amenazados sus ingresos, expresaron los obispos de México en un mensaje luego de su reunión de Asamblea Plenaria en el tiempo Pascual, pero también lamentaron que el tiempo electoral distraiga la atención de los gobernantes y entorpezca la aplicación de medidas que den respuesta a las necesidades urgentes del país.

“Vemos con esperanza que la vacunación ha comenzado y desearíamos que este proceso fuera aún más ágil para que la salud de todos corra menos riesgos, la economía pueda reactivarse, los niños puedan asistir a la escuela, los índices de violencia dentro y fuera de los hogares puedan disminuir. Esperamos tener las condiciones necesarias para retomar el camino de la fraternidad y la reconciliación que nos ayude a reconstruir el tejido social, tan resquebrajado hoy”.

De igual forma indicaron que la recuperación del país se vuelve más compleja al encontrarnos en un período electoral, el cual distrae la atención de los gobernantes y entorpece la aplicación de medidas que den respuesta a las necesidades urgentes del país.



“Vemos con preocupación la creciente polarización de los discursos políticos; el alarmante índice de candidatos asesinados; regiones enteras bajo el yugo del crimen organizado; el maltrato a los migrantes y la militarización de las fronteras”.

Asimismo, reclamaron que algunos legisladores estén más atentos a la promulgación de leyes influidas por la ideología de género, en lugar de promover los valores que han sostenido nuestra nación como la familia, el respeto a la vida, la educación en valores cívicos y la libertad religiosa. “Además, omiten estar atentos a que se cumplan las leyes en materia educativa, garantizando una educación no ideologizada, que asuma el diálogo con los padres de familia, maestros y expertos en la elaboración de los libros de texto”.

Ni el mercado, ni los empresarios, ni la sociedad civil, ni el gobierno por sí solo pueden resolver esta crisis, es necesaria la colaboración de todos. “Reconocemos que hoy nos toca a todos aportar lo mejor de nosotros mismos, especialmente la fraternidad y la solidaridad que nos caracteriza, para hacer posible un mejor México”.



Y es que los prelados dijeron que es urgente buscar las soluciones para enfrentar la emergencia sanitaria, familiar, educativa, económica y de seguridad. “¡No hay tiempo para divisiones ni descalificaciones! Hemos de aprender a dejar nuestros intereses egoístas, individuales o partidistas, para alcanzar un diálogo por el bien de todos los mexicanos”.

Invitaron a quienes gobiernan o aspiran hacerlo, a que reflexionen en su papel de promover acuerdos que ayuden a la superación de esta crisis en muchos aspectos.
“Las campañas que siembran división y polarizan la sociedad nunca serán un camino para el bienestar y la paz; tampoco ayudan las políticas públicas que atentan contra la dignidad de la persona, o contra el medio ambiente. Y los votantes que ejerzan su derecho al voto”.

Pidieron no ser cómplices de campañas de desinformación, del apoyo a candidatos que estén en contra de la vida, la institución matrimonial, la dignidad humana, y de la libertad religiosa; así como el apasionamiento extremo que dañe los nexos familiares o sociales. “No nos dejemos comprar por dádivas o condicionar por amenazas de ningún tipo, nuestro voto ha de ser libre y soberano”.



También aprovecharon para agradecer a los médicos, enfermeras y personal de apoyo, por su servicio durante esta pandemia. En tanto a los maestros los felicitaron por su servicio generoso, esforzado y creativo durante esta época de pandemia.

Y a los agentes de pastoral, sacerdotes, religiosos y laicos, les agradecieron por estar siempre cercanos al Pueblo de Dios en estos tiempos difíciles. “Reconocemos que para muchos esto ha significado dar la vida, por ellos elevamos una oración al Señor de la vida para que sea su mejor recompensa; y para quienes continúan arriesgando su vida por encarnar la misericordia del buen samaritano acercando el alimento de la caridad, la palabra y la eucaristía a sus hermanos”.