Para evitar asaltos, transportistas de carga han blindado sus unidades

A pesar de que es muy costoso, algunos empresarios del transporte han decidido blindar sus vehículos de carga y así evitar ser víctimas de asalto, indicó el Consejero nacional de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (CANACAR), Tirso Martínez.

“Se ha tenido que recurrir a eso, porque hay momentos en que los operadores son parados en las carreteras y si no lo hacen entonces se meten en problemas. Además que la policía federal, no logra cubrir todas las carreteras en todas sus áreas o extensión”.

Dijo que hasta este momento el número de unidades blindadas en el país son pocas, incluso no alcanzan ni el uno por ciento, ya que el costo es muy elevado, y dependiendo de la unidad es el monto que tienen que pagar, a veces más del cincuenta por ciento del precio de la unidad.

“Puede variar desde medio millón hasta dos millones de pesos blindar una unidad, depende del grado de blindaje, de para qué se quiera; es muy poquito, no llega ni al medio por ciento, son muy pocas empresas, porque además los clientes no lo pagan”.

Este problema por lo regular se presenta en el Distrito Federal, que es donde se trasladan artículos que tienen un valor económico considerable, como por ejemplo celulares, cuyo cargamento es millonario.

Indicó que el control satelital no funciona al cien por ciento, incluso quien se roba alguna unidad busca la forma de quitarle todo el equipo, ya que este lo único que hace es que localizar pero no tiene mecanismo para rastrear cuando son hurtados los camiones.

“Se roban abarrotes, cemento, varilla, electrodomésticos, de todo” ya agregó que el problema no solo es que se roben la mercancía, sino que también los vehículos.

Las pérdidas dijo que no estima a cuánto pueda ascender, pero no descartó que pudieran ser millonarias, por ello es que este sector ya hizo y seguirá haciendo un llamado para que las autoridades estatales y federales principalmente pongan puntual atención en este problema.

Antes de concluir puntualizó que no hay paradores seguros, lo cual es grave ya que por fuerza el conductor tiene que pararse a descansar después de haber manejado por horas.