Peligro en Cuichapa por tomas clandestinas; sin precaución familias recolectan gasolina

Cientos de personas llegan en camionetas y taxis de Córdoba para recoger miles de litros de gasolina que se fugan de los ductos de PEMEX y aunque las tomas ya fueron selladas, el hidrocarburo que se consume, se va entre las rocas para caer cerca del río Blanco.

Empleados de Petróleos Mexicanos expresaron que en ese caso ellos ya no pueden sancionar a nadie, porque no están robando el hidrocarburo, ya que es gasolina contaminada, que por ser violada la toma por bandas “huachicoleras” quedan abiertas las tomas.

Todo el combustible que se escapa por horas, mientras es controlada y sellada la fuga, se va a la tierra y como la toma se ubica en la parte alta del cerro, el hidrocarburo se filtra y baja hasta brotar cerca del río Blanco.



Ahí es cuando la gente aprovecha para juntar la gasolina con jícaras y vaciarla en tambos de 20 litros o más y ellos saben cómo utilizarla para sus vehículos.

Lo que es un hecho, es que en esa zona se convierte en un grave peligro, porque la gasolina al ser un combustible altamente volátil; los vehículos que se estacionan y otros que circulan, pueden causar un chispazo por el escape y provocar una explosión con lamentables consecuencias.

Ahí se pudo observar a mujeres cargando en brazos a sus hijos, sin el menor cuidado, vigilando el vehículo mientras su acompañante va a recoger la gasolina.



Por su parte, el presidente municipal de Cuichapa, Sergio Díaz, hizo un llamado al Gobierno federal para que tome cartas en el asunto y vigile más los ductos de PEMEX, porque se teme que en unos de estos derrames pueda suceder una explosión de lamentables consecuencias.