Pide al Gobernador arreglar puente de Xotla, pobladores están incomunicados

Señor Javier Duarte de Ochoa

Gobernador Constitucional del Estado de Veracruz.

Desde ese triste 17 de septiembre de 2010, como consecuencia de la furia del huracán "Karl", fue afectada una importante vía de comunicación que une varias comunidades rurales. En esa fecha el puente de Xotla, del municipio de Tlaltetela, Veracruz, localizado a un costado de los baños termales de Carrizal, resultó dañado sensiblemente y provocó la pérdida de 5 personas, una de las cuales nunca fue hallada. Ya han pasado 22 meses de ese acontecimiento y la obra de reconstrucción sigue pendiente, ante la incertidumbre de los pobladores de la región porque la época de lluvias se acerca y se encuentran aislados.

Los trabajos de reparación van muy lentos y se carece de la maquinaria necesaria para colocar los sustentos o bases de dicho puente. Los vecinos y habitantes de las localidades afectadas han recurrido a las autoridades competentes, pero sólo han recibido promesas, evasivas y falsedades de esos funcionarios que tienen la responsabilidad de la tarea reparadora; por ello en esta ocasión me atrevo a reiterarle mi solicitud para que tenga a bien girar sus superiores órdenes y se culmine esa urgente obra que beneficia a cerca de tres mil habitantes de varios poblados.

Soy una persona de la tercera edad, tengo 65 años y nieta de un agricultor que fue muy responsable. Me preocupan las familias que habitan en esa área incomunicada; muchos de sus miembros tienen que trabajar o estudiar y confrontan problemas de traslado. Ante una emergencia y con el río crecido no podrán recibir auxilio o apoyos, pues el vado existente resulta peligroso y la escalera de caracol que actualmente tiene el puente deteriorado no es fácil de subir para una persona mayor enferma o con dificultades para caminar.

Por otra parte, señor Gobernador, me inconformo como ciudadano ante las carencias que padecen esos poblados rurales que se ubican muy cerca de la ciudad de Xalapa, capital de nuestra entidad, pues no existe por esos lares el servicio telefónico ni tampoco cuentan con el personal que salvaguarde la seguridad pública. Ante emergencias médicas urge un servicio básico de salud, con presencia de personal capacitado y con medicamentos. Me incomoda cómo se derrochan recursos valiosos en actividades suntuarias y para nada se proyectan respaldos para esas comunidades marginadas que ameritan superar cuestiones del orden educativo, cultural, comunitario y laboral.

Si en verdad se quiere hacer justicia al pueblo de México, habrá que demostrarlo con acciones y no con palabras. La gente está harta de promesas; demanda respuestas y proyectos factibles. En lo que se refiere al campo, al agro mexicano, se tendrán que instrumentar políticas que aterricen en agroindustrias, en asesorías agrícolas y pecuarias, en talleres comunitarios, en cooperativas de producción y en planteles formativos que fusionen la teoría y la práctica. Ya no podemos esperar más, pues la pobreza y la miseria se incrementan tanto en el campo como en la ciudad. Usted tiene la palabra y cuenta con el apoyo de las personas que anhelamos un mejor Veracruz.

Atentamente
Rosa Aurora Torres Vásquez